La diputada a Asamblea Nacional por la Mesa de la Unidad, Delsa Solórzano, responsabilizó al ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol, por la muerte de Miguel Castillo Bracho este miércoles en Las Mercedes, tildándolo de "asesino".
En rueda de prensa, Solórzano denunció que los manifestantes que salieron a protestar fueron víctimas de una «brutal represión» por parte de la Guardia Nacional, órgano que a su juicio «recibió la orden» de reprimir fuertemente cuando «solo se pretendía enarbolar lo establecido en la Constitución».
«No podemos expresar con palabras lo que sentidos por los jóvenes cuando salen a luchar por la libertad, que nunca han vivido, y sus vidas son cegadas (…) por la represión de unos funcionarios que defienden su comodidad (…) ministro Néstor Reverol. Usted señor ministro es el responsable de las muertes en Venezuela, Te has convertido -y asumo la responsabilidad de lo que voy a decir- en un ministro asesinno», exclamó.
Recordó que las armas solo están en poder de la Fuerza Armada Nacional, de acuerdo con la Carta Magna, por lo que los proyectiles y el manejo de las armas de fuego no las manejan los manifestantes.
Hizo referencia al director de la Policía Nacional, que este miércoles señaló que los manifestantes pacíficos «han sido víctimas de colectivos armados. Ese funcionario los llamó bandidos y agregó que ‘estaban mejor armados que la Policía». En ese sentido, acusó de que estos grupos civiles armados agreden a comunicadores sociales que ejercen su trabajo, «quienes les arrebatan sus equipos de trabajo, les roban sus teléfonos (…) como si no se tuviera conocimiento real de lo que pasa en Venezuela.
También aseveró que el ministro Reverol es quien «salta los mandos» para ordenar la represión en Venezuela, por lo que lo exhortó a «ponerse al orden de la Constitución y deponer las armas».
Por otra parte, elevó sus quejas sobre presuntos acosos a diversos alcaldes de la Unidad como los de Baruta, Chacao, Los Salias e Iribarren y según su opinión «se quiere violar la voluntad ciudadana», por lo que afirmó que «no permitirán que se siga obstruyendo la voluntad de los venezolanos con los mecanismos de fuerza que quieren imponer».
Denunció además la detención del médico Sergio Contreras, quien fue detenido según Solórzano por «tener un megáfono» en la mano. «Lleva las redes del diario El Nuevo País y es asistente parlamentario de Freddy Guevara (…) Soy abogado (…) y en ninguna parte existe el porte ilícito de megáfono».
Afirmó que todo lo que sucede en Venezuela está siendo recopilado en un expediente «que será levantado para enjuiciarlo en tribunales internacionales».
Ofreció detalles de las próximas acciones de la Mesa de la Unidad: a las 9:00 PM de este miércoles, un cacerolazo en rechazo a Néstor Reverol. Este jueves, la Mesa de la Unidad acompañará a la comunidad del colegio San Ignacio de Loyola, a las 10:00 AM, de donde era egresado Miguel Castillo, a una caminata que finalizará en el lugar donde cayó abatido.
«El viernes continúa la agenda de la Unidad. El sábado el pueblo se moviliza contra la muerte, en favor de la vida (…) con caravanas que irán de cada rincón de Venezuela (…) El lunes se realizará un gran plantón desde las 10:00 AM», anunció.
Lo que lo mató fue una metra
Por su parte, el también parlamentario a la Asamblea Nacional, José Manuel Olivares, manifestó su «indignación, dolor y molestia» por la muerte de Catillo y resaltó que «pudo haber sido cualquiera de nosotros que lucha por un sueño».
Alertó que, «de acuerdo a informes médicos y paraclínicos» que el joven de 27 años «fue asesinado por la Guardia Nacional con una metra». En ese sentido, exhortó a la Fiscal Luisa Ortega Díaz, así como a otros funcionarios del Ministerio Público a actuar. «Confiamos en el debido proceso», afirmó.
«Este joven fue asesinado por una metra que llegó por su brazo izquierdo, que dejó orificio de entrada y salida para alojarse en su zona intercostal», dijo.
Calificó de «asesinos» a todos los oficiales de los componentes castrenses del país y aseveró estar seguro de que «los padres de Cañizález, Castillo y Pernalete están convencidos de que la Guardia Nacional asesinó a su hijo».
Hizo un llamado a los efectivos de la Guardia Nacional a «no ser el muro» que separa a «la mayoría de Venezuela que quiere cambio» de aquellos que gobiernan.
Ofreció un balance de la jornada de este miércoles y dijo que solo en Caracas se produjeron «600 heridos. Un asesinado (…) 50 pacientes con laceraciones».]]>
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