Familiares de presos políticos en Carabobo solicitan casa por cárcel para los detenidos
Familiares de algunos presos políticos en el estado Carabobo, junto a los abogados defensores, se encuentran realizando trámites para solicitar medida de casa por cárcel, debido al deterioro de su estado de salud.
En la lista está el presidente de la Federación de Trabajadores de Carabobo (Fetracarabobo), Omar Escalante, quien fue privado de libertad el pasado 8 de agosto y que en la actualidad es investigado por presuntamente mantener amistad con el general retirado y ex comandante de la 41 Brigada Blindada, Guillermo Rangel, posiblemente vinculado con el asalto al Fuerte Paramacay.
Jeankar Omar Escalante Rodríguez, hijo del presidente de Fetracarabobo, manifestó que el dirigente sindical ha perdido 17 kilos desde que está recluido en la cárcel de Ramo Verde, en Caracas.
Manifestó que el hombre, de 65 años, tiene varias afectaciones: es insulinodependiente, padece de hipertensión arterial; hace un año sufrió de un infarto y además tiene dos operaciones de columna, lo cual amerita ayuda para levantarse y acostarse.
En ese sentido, recalcó que las condiciones en el recinto carcelario no son óptimas para su estado de salud, ya que duerme en una colchoneta puesta en el piso.
“Queremos que sea trasladado a la casa, mientras continúan las averiguaciones, porque los dolores que sufre son fuertes”, denunció Jeankar.
La aprehensión de Escalante se produjo durante un allanamiento realizado por la brigada antiterrorismo del Sebin en La Isabelica, urbanización en la que reside junto a su familia.
Por su parte Elsa Henríquez, madre del dirigente de Voluntad Popular, Carlos Graffe, quien también se encuentra en Ramo Verde, señaló que está realizando la misma solicitud, pues su hijo requiere de una intervención médica por deficiencia en sus riñones.
El dirigente de VP debía operarse entre los meses de julio y agosto, que fue en el momento de su aprehensión.
Henríquez aseguró que está preocupada porque este tipo de operaciones no se le puede dar mucha larga, pues su condición podría deteriorar gravemente su salud.
Recordó a la sociedad civil que es importante mantener la lucha porque los derechos de los jóvenes, continúa. «No solo pensemos en los detenidos, debemos considerar a los caídos, aquellos que ya no se encuentran entre nosotros, para que otros no sufran ese destino».
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