Universidad de Carabobo celebró 60 años de su reapertura

La jornada comenzó con una misa en la iglesia San Francisco, en el centro de la ciudad de Valencia, y continuó con un acto protocolar en el Teatro Municipal, ubicado a un lado de la antigua Facultad de Derecho de la UC.
Los asientos fueron llenándose en el teatro con los egresados de las primeras promociones de esta casa de educación superior del centro del país;  en medio de una música especial fueron llamando a los graduandos de distintas carreras desde los años 1966, 1967 y 1968. Todos vistieron sus medallas de graduación. Se trató de un momento emotivo, aplaudido de pie por los asistentes.
La rectora de la UC, Jessy Divo de Romero, explicó previamente a los medios de comunicación social, que el propósito era honrar a esos primeros profesionales que se formaron en las aulas de la universidad carabobeña porque en buena medida ellos dieron el renombre que ostenta la institución.

Recalcó que luego de 60 años, se encontraban en el mismo lugar donde se firmó el decreto número 100 (en el Teatro Municipal de Valencia), que anunció la reapertura de la UC y donde se decidió que reabrían sus puertas “para nunca más cerrarlas”, tal como ha sucedido.
“La reapertura de la Universidad de Carabobo devolvió bríos a la ciudad, al estado y a la región y se encumbró como centro de gravedad del saber, como propiciadora de otras casas de estudio. En el devenir de todos estos años, la institución se ha posicionado hasta alcanzar niveles de excelencia, fruto de la formación de su gente, de la conjugación de esfuerzo, valor y trabajo. Todos los rectores han sabido afrontar el temporal con las manos puestas en el timón, cada uno en las olas de las circunstancias, animando la marcha, velando porque la flama no se apague”, dijo la rectora Divo de Romero durante su discurso.

Sin embargo, este aniversario les llega en medio de una crisis financiera y un éxodo de estudiantes, profesores y empleados que debido a la crisis buscan oportunidades en el exterior.
La rectora indicó que no es posible sostener la universidad sobre la base de carencias y presupuestos deficitarios que a su parecer es producto de una política gubernamental contra el intelecto y los saberes.
“Nuestras armas hoy se reafirman y son fusiles plenos de razón, de verdad, de fuerza, no son armas ni municiones, son unas cargadas de esperanza y fuerza”, manifestó Divo de Romero.

“Aquí no se está pidiendo carnet ni se ofrecen dádivas para que las personas defiendan a su institución. La universidad tiene per se quienes la defienden y la aman. Es mi alma máter porque aquí me formé y a ella le he dedicado casi 40 años porque cumplo en noviembre 40 años de graduada”.]]>