A las 11:22 p. m. del martes, un nuevo apagón masivo -el primero de abril- sumió en oscuridad a la mayoría de los estados del país. Más temprano, Juan Guaidó, jefe del Parlamento -quien también ha sido reconocido como presidente interino por más de un centenar de países- había convocado a la población a las calles para manifestar su descontento con Miraflores.
En Caracas, los ciudadanos vieron frustrada su semana con servicio de luz continuada (una «suerte» reservada solo para los capitalinos) y, este miércoles, se concentraron en distintos puntos de la ciudad para reclamar soluciones y respaldar la ruta establecida por Guaidó: «cese de la usurpación, Gobierno de transición y elecciones libres».
Manifestantes se solidarizaron con sus compatriotas del interior del territorio, que ha padecido los embates de la crisis eléctrica de forma aún más vertiginosa.