«En la Unión Europea hemos apostado por el proceso que se inició con Noruega, el llamado diálogo de Oslo, y seguimos apoyando esa iniciativa», dijo Silva.
Tanto el chavismo como la oposición se responsabilizan mutuamente de la suspensión del mecanismo de Oslo, que tuvo un precedente en el fallido diálogo en República Dominicana entre 2016 y 2018.
Silva mostró su respeto a las iniciativas que los distintos sectores del país suramericano llevan adelante para solucionar la crisis, pues son los venezolanos «los que tienen que decidir todo aquello que sirva para unificar al país para hacerle progresar».
«Lo contemplo con todo el respeto del mundo en la medida en que sirva para reconciliar o para tomar decisiones que sean positivas para la democracia venezolana, y siempre será bueno y bienvenido», dijo al ser consultado sobre la llamada mesa de diálogo nacional que se acordó entre el oficialismo y partidos minoritarios de oposición la pasada semana.
En la mesa de diálogo nacional, el régimen de Maduro y un sector minoritario de la oposición convinieron el regreso de los diputados chavistas al Parlamento, la liberación de presos políticos y promover un mecanismo de intercambio de petróleo por alimentos, entre otros «acuerdos parciales».
El diplomático español precisó que para la Unión Europea, «la solución a los problemas de Venezuela pasa, entre otras cosas, porque haya unas elecciones y porque haya acuerdos inclusivos».
En cuanto al retorno de los diputados oficialistas al Parlamento, que habían abandonado voluntariamente hace dos años, Silva lo consideró «un signo muy positivo» y expresó que lo que contribuya a la reconciliación y al debate democrático «es muy positivo para todos los países».
Al ser consultado sobre el apoyo de España para la entrega de ayuda humanitaria, explicó que se está intentando trabajar con «todas las partes para que sea posible» y que la cooperación española y europea ya colabora con países que son receptores de inmigrantes y con algunos organismos internacionales.
Según Naciones Unidas, en Venezuela uno de cada cuatro personas requiere ayuda humanitaria de manera inmediata