“Con el propósito de conocer la realidad fronteriza entre el Táchira y Norte de Santander y escuchar la voz de los empresarios binacionales sobre cómo se encuentra el comercio en la zona, el presidente nacional de Fedecámaras, Carlos Fernández, realizó una visita a las localidades de Ureña (Venezuela) y Cúcuta en Norte de Santander.
«Vinimos a conocer la realidad de la frontera, del comercio interfronterizo, y la realidad del intercambio binacional», dijo Fernández a El Estímulo. Explicó que las realidades a veces son complejas, profundas y difíciles de entender para quienes viven lejos de la frontera.
«Traemos una palabra de aliento y vamos a identificar las potencialidades, además de cuáles pueden ser las principales vías para buscar una solución al largo cierre del intercambio comercial formal entre Venezuela y Colombia», explicó el empresario venezolano.
Para el entrevistado, lo importante, pertinente y perentorio es que se restablezcan las relaciones comerciales y consulares, entre ambos países. «Tenemos una historia común, muchos colombianos viven en Venezuela y hay muchos venezolanos que hacen vida en Colombia. Es una realidad que se necesita tráfico, transporte e intercambio. En Colombia hay más venezolanos que en 16 estados de Venezuela «.
El representante gremial dijo que se requiere poner en primer lugar a los intereses de las personas y tratar de separar las diferencias diplomáticas y políticas de la realidad económica, social y de la vida de cada una de sus ciudades.
Sensibilizar el problema
El presidente de Fedecámaras considera que al tema de cierre de la frontera para el intercambio comercial le ha hecho falta «sensibilizarlo». Propuso la instalación de una mesa de diálogo o punto de encuentro entre las autoridades de Venezuela y Colombia. De esta manera se buscarían soluciones al cierre comercial de los puentes internacionales que une a a ambas naciones y que ya suma varios años interrumpido.
Aunque no se fijó una sede definitiva para el encuentro, la propuesta de los empresarios se sorteó entre Bogotá y Cúcuta. «Nuestras economías son complementarias y para lograr esa complementariedad se requiere del tráfico libre y formal de productos de un país a otro para poder atender las necesidades de los ciudadanos y poder potenciar nuestras economías».
Fernández recordó que el fin de toda actividad política, social o comercial es el bienestar del ser humano y tratar de buscar espacios para el crecimiento. «Hacen falta espacios multisectoriales donde nos sentemos a definir no solo la solución del problema (cierre de puentes al intercambio comercial), sino cómo podemos compartir un futuro común. Es el momento que nuestros gobiernos entiendan que hay que dividir el tema político del diplomático y del tema humano».
Colombia y Venezuela deben separar lo político de lo económico y abrir los consulados, puntualizó el presidente de Fedecámaras.
«Proponemos un plan»
Del lado colombiano, el presidente del comité intergremial del Norte de Santander, Carlos Luna, presente en la reunión de Cúcuta, valoró la presencia de Carlos Fernández y los empresarios venezolanos, representantes de Fedecámaras Nacional y del Táchira para tratar el tema que preocupa a colombianos y venezolanos.
«No queremos la queja. Lo que se propone ahorita es un plan de trabajo que haga crecer a nuestras empresas y sectores económicos con la creación de ruedas de negocios, además de la creación de una organización binacional en la que participen en gremios locales y nacionales y salir adelantes», dijo Luna.
El representante del vecino país coincidió con el presidente nacional de Fedecámaras, al señalar que las relaciones políticas y diplomáticas tienen que mejorar lo más rápido posible para restablecer el paso libre al transporte de mercancías entre Táchira y Norte de Santander, tal cual como ocurre ahora por Paraguachón.