Economía

Ronald Balza: Ya se hace muy costoso salir de la crisis en Venezuela

El profesor Ronald Balza emprende una nueva fase en su vida profesional, ahora es el decano encargado de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales en la UCAB. Persiste en el objetivo de que en las universidades deben congeniar los puntos de vista opuestos e incentivar la investigación. Como economista sostiene que el gobierno empeora la crisis con la inercia para atender los graves problemas económicos y con el empeño de mantener los controles.  Desde el 1° de septiembre, el profesor Ronald Balza ocupa el cargo de decano encargado de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB).

Publicidad
Ronal Balza
FOTO: Cristian Hernández

Entre los planes a ejecutar en su nuevo rol resalta la continuación de su antecesora Patricia Hernández, en la puesta en marcha del Plan 20-20 que comprende la organización interna de esta casa de estudios con el cambio en el pensum y evaluación de la gestión, entre otros.

“Si las universidades no están bien organizadas no pueden dar hacia afuera. Debemos garantizar que siga siendo un espacio abierto a la discusión de todas las ideas y del respeto de todos los puntos de vista”.

Graduado de economista desde el año 1993 en la Universidad Central de Venezuela (UCV), maestría en Teoría Económica en la UCAB en 1998 y un doctorado que espera finalizar este año.

«En la universidad tratamos de realizar foros de discusión en los que se trata de determinar cómo enfocar un punto o dónde están los desacuerdos de lo que se debe hablar, lo lógico es que las discusiones se hagan y se puedan mostrar. Las autoridades no pueden presentarse como voceras de un único punto de vista, porque la universidad no es una sola sino una oportunidad de discusión», afirma.

Como experto en materia económica, Balza afirma que el gobierno empeora la crisis con la inercia para atender los graves problemas económicos y con el empeño en la aplicación de la política de controles.

«Desde hace cuatro años los economistas advertimos de las consecuencias que se generarían sino se tomaban las medidas necesarias. Ya hoy en día se manifestó. No era sostenible mantener el ritmo que traía el gobierno con la caída de los ingresos».

Aunque no es dado a comparar la actual crisis venezolana con la de otros países, destaca que pueden ofrecer una idea de las soluciones que se puedan ejecutar. Es de los pocos analistas que cuestiona a DolarToday y explica el por qué.

– ¿Qué puede suceder en el país si el gobierno continúa sin aplicar un plan económico integral, en vista de que ya muchos afirman que se vive la peor crisis de la historia?

– Cada día se hace más difícil salir de la crisis. Hay muchos factores que son insostenibles, como la inflación. El gobierno además ha creado distintos esquemas organizativos para distribuir alimentos por asignación directa pero se han encontrado casos de corrupción. Si el gobierno sigue ejecutando las mismas prácticas y estrategias, llegará un momento que será insostenible y difícil de revertir el deterioro. Ya estamos viviendo mal y viviremos peor.

– ¿Qué diferencias hay entre la actual crisis económica y las que han ocurrido en la historia económica del país?

– Es difícil comparar, pero estamos en una situación muy difícil. Quizás las crisis de otros países nos pueda ayudar para resolver la magnitud de las soluciones que necesitamos. Hoy en día no sólo tenemos problemas de divisas porque han caído los ingresos petroleros, sino también que el gobierno se endeudó significativamente a través de vías formales e informales, las empresas fueron expulsadas del país; además que se ha destruido la estructura formal del trabajo. Estamos en una situación en la que el resto del mundo observa muy especial nuestra crisis; ya que el país está desinstitucionalizado, es decir, tiene instituciones que expulsan al inversionista de manera deliberada.

– El gobierno está enfrascado en la diatriba política del referendo revocatorio, por lo que hay pocas esperanzas en que se apliquen medidas.

–  Es necesaria una estabilidad política para que haya estabilidad económica. Durante este año con Miguel Pérez Abad en el gabinete económico se ejecutaron algunas acciones como el ajuste de algunos precios de bienes, pero esto no es suficiente si no publican cifras oficiales, si no se explica cómo se van a llevar adelante las estrategias macroeconómicas, ni cómo se resolverá el problema de las empresas públicas que registran pérdidas, si no se hace presentando el presupuesto de la Nación y las previsiones para el próximo año. Es decir, no se crea estabilidad política y no se crea confianza. Hasta que no cambie la orientación política de Venezuela, ¿habrá quién esté dispuesto a otorgar financiamiento en esas condiciones o a hacer inversiones?

– ¿Ya es difícil salir de la crisis económica?

– Ya llegamos a un momento en que explotar las potencialidades de Venezuela se hace muy costoso. El país ha expulsado también a muchos venezolanos con conocimientos, hay inversionistas que ya no quieren venir y repito, se debe volver a la institucionalidad para que se tenga confianza en las acciones que se ejerzan. El gobierno empeora cada día la crisis. Cómo se protege a los débiles en un sistema donde puede haber un abuso de posición de dominio, cómo se protege a los pobres de una situación en la que los precios tienen que aumentar para que se pueda producir.

– Muchos consideran que es preferible aumentar los precios con tal de conseguir los productos, pues ya los pagan a los bachaqueros. ¿Esto normalizará el abastecimiento o ayuda a sincerar los precios?

– En una situación de deterioro económico, al liberar los precios el problema aparece para las familias de menores ingresos. Personas de clase media quizás tienen más posibilidades de pagar a mayores precios, pero a medida que siga incrementando la inflación es posible que esa persona no lo pueda pagar más adelante. Es muy claro que si los precios no cubren los costos, no se puede producir y si los precios se liberan, estos no son la causa de la inflación, como si lo son el aumento del gasto público, la escasez, la inestabilidad del tipo de cambio, el financiamiento monetario, entre otros.

– ¿Los CLAP pueden llegar a cubrir las necesidades de abastecimiento?

– Hay mecanismos de transferencias directas para que las personas que estén en peores condiciones pueden comprar los productos que requieran, es decir, a través de las pensiones, salarios, pagos temporales por despido laboral o mientras salen de su situación de pobreza. Ya el gobierno ha puesto en marcha varios planes para abastecer a la población, enfocándose en la distribución como los Abastos Bicentenario, los Mercal y ahora los CLAP, pero ya las propias autoridades han reconocido que ha incentivado el bachaqueo y la corrupción.

– El dólar paralelo se mantenido estable, ¿el gobierno derrotó a DolarToday?

– No se ha derrotado el dólar paralelo porque todavía existe. La existencia del paralelo no da garantía de estabilidad económica. El paralelo se ha mantenido estable porque existe contracción económica, ha bajado la liquidez y el gasto público, pero además existen marcadores como DolarToday, que ha cambiado la estrategia de calcularlo y no es explícita, es decir, se desconoce cómo es la medición. Recuerden que calculaba el paralelo de acuerdo al precio del dólar en la frontera colombo-venezolana, la cual fue aceptada por dos años, pero ahora señalan que la cotización se ejecuta de acuerdo a operaciones privadas, por lo que con estos cambios se observa que respondían al interés de quienes podían estar haciendo transacciones tomándolos como referencia.

– El precio del dólar en el Simadi también está aumentando, ¿el gobierno estará buscando hacer más atractivo el esquema para que Pdvsa y otras empresas vendan sus divisas?

– La economía subterránea ha llegado hasta el Banco Central de Venezuela. Se nos informa el precio pero no se nos dice a quiénes le autorizan divisas a través de este sistema. Es decir, el comportamiento del esquema es cada vez más difícil de interpretar. Vamos quedando fuera del cupo viajero por lo costoso que es actualmente, pero no sabemos por qué es más alto para algunas empresas, porque de paso no todas tienen acceso. No sabemos quiénes están participando en este mecanismo de asignación. No sabemos tampoco quién recibe dólares a la tasa preferencial de 10 bolívares por dólar.

– Mencionaste la atención que se debe tener sobre las empresas públicas que no han podido ser exitosas, ¿definitivamente se deben privatizar?

– A veces se piensa que para resolver problemas tan graves, es necesario removerlas por completo. A veces hacerlo así lo que hace es que aparezcan otros problemas. Cuando señalamos que se debe volver al sector privado aquellas empresas que tienen dificultades, un futuro gobierno debe tener muy en cuenta a quién se vende. Esto como una manera de evitar que caigan en manos de personajes altamente cuestionados.

Publicidad
Publicidad