Con esto, ya no sería necesario ni siquiera enviar la consulta al TSJ, para que éste emita opinión sobre la constitucionalidad o no de las leyes, lo que es igual a, un poder cercenando a otro, igualmente elegido por el voto de los ciudadanos.
El diputado de la Comisión de Finanzas del parlamento, Luis Lippa, dijo que hay que buscar la manera de llegar a un entendimiento entre poderes. «Aquí nadie puede quitarle las funciones a nadie, Aquí hay que respetar la autonomía de los poderes, el señor presidente está tan legitimado porque ganó unas elecciones como los diputados de la Asamblea Nacional«, dijo Lippa.
Según el legislador electo por estado Apure, esa acción que llegare a tomar el Ejecutivo solo perjudicaría a los ciudadanos. «Si hay alguien que todavía confía en invertir en Venezuela, bueno estaríamos repitiendo la escena del irrespeto a la propiedad privada, estaríamos ocasionando desconfianza y alejando esas inversiones», manifestó el parlamentario.
De ocurrir esto, se constituiría en un golpe de Estado, porque solo hay tres formas de cambiar o eliminar a los integrantes del Palacio Federal Legislativo, a saber: elecciones cada cinco años, por lo que establece el artículo 240 de la constitución, el cual faculta al Presidente de la República para disolver la Asamblea Nacional si ésta remueve entres oportunidades al Vicepresidente en un mismo período constitucional y la tercera, luego de una constituyente cuando se deben relegitimar los poderes.
«Sería un golpe de Estado a los poderes que fueron nombrados por el soberano, sería un autogolpe en todo caso, esto lo que generaría es más incomodidad en el país, una sociedad que acaba de firmar en un 1% para activar un mecanismo constitucional y revocar el mandato del presidente a través del voto», aseveró Luis Lippa.