La sismóloga de ese centro Joan Latchman aclaró hoy vía telefónica que una alerta amarilla significa que las embarcaciones deben abstenerse de rodear la zona marítima de exclusión de 1,5 kilómetros del volcán aunque se pide que, por precaución, se mantenga la vigilancia.
La Agencia Nacional de Desastres de Granada indicó en un comunicado que se ha reducido «significativamente» la actividad sísmica interna del volcán, localizado a 9 kilómetros de la isla, ya que según las últimas observaciones «no hay nada inusual en el área».
La mayor erupción de Kick em Jenny se registró en julio de 1939, cuando propulsó material volcánico a la superficie y generó una serie de tsunamis con olas de hasta dos metros de altura.
La última erupción de Kick em Jenny se registró en 2001.