«Continuamos adaptando nuestro negocio a la dinámica de los mercados en los que estamos presente. Acorde a esa dinámica y adaptación, hemos cerrado un número reducido de restaurantes recientemente», señaló la firma en un comunicado enviado este sábado a la AFP, sin precisar el número de locales clausurados.
Sin embargo, la prensa local y usuarios informaron que son siete los restaurantes que cerraron, cuatro de ellos en Caracas y los otros en la provincia.
Arcos Dorados aseguró en su comunicado que «no está cerrando franquicias» y destacó que en este momento operan «más de 120 restaurantes» en Venezuela.
«Seguimos comprometidos con el desarrollo del país. Como lo hemos hecho durante 33 años en Venezuela, y a nivel global desde que McDonald’s empezó a operar», acota el texto.
Venezuela atraviesa una aguda crisis económica, caracterizada por una hiperinflación que este año podría superar 1.000.000%, según el FMI, y una aguda escasez de alimentos y medicinas.
El presidente Nicolás Maduro comenzó a aplicar el pasado 20 de agosto un conjunto de reformas económicas, que arrancaron con el lanzamiento de nuevos billetes que restan cinco ceros a la moneda local, pulverizada por la inflación.
Además, el mandatario aumentó en más de 3.400% el salario mínimo y aseguró que su gobierno asumirá el diferencial del alza en las pequeñas y medianas empresas del país durante 90 días.
Tras el anuncio de las medidas, que también contemplan un aumento de impuestos y de la gasolina -la más barata del mundo- muchos comercios no han abierto y analistas advierten que los más pequeños no podrán pagar el nuevo salario mínimo.