Y es que al perder los sentidos se va derecho a la calle ciega de la locura, por eso en Hollywood vemos excentricidades como estas
Para ser bella… hay que sangrar
Las prácticas de belleza de la mediática Kim Kardashian pueden tornarse sangrientas. Y es que la recién casada —por tercera vez— se sometió al Vampire Facial. Este es un tratamiento en el que se extrae la sangre del paciente para luego ser inyectada en la cara del mismo, con agujas de acupuntura. Al terminar se tiene una apariencia masacrada, pero jovial.
Juntos eternamente
El inmortal actor Marlon Brando conservó las cenizas de su amigo y colega Wally Cox —luego que pasara a mejor vida en 1973. Cuando el “bad boy” de la pantalla grande se reencontró con Cox, fuera del plano terrenal, en 2004, no se conformó con el reencuentro espiritual. Su voluntad postrera, sí la última antes de morir, fue que juntaran sus cenizas con las de su querido amigo. Polvo al polvo.
Respiración profunda
Siguiendo con la línea de cremaciones y excentricidades, el guitarrista de The Rolling Stones, Keith Richards, además de inhalar cualquier tipo de sustancia, afirmó haber inhalado las cenizas de su padre.
Recuerdo alienígena
Fran Drescher, conocida por su papel en el sitcom The Nanny y su peculiar tono de voz, asegura que, durante su adolescencia, fue abducida por seres extraterrestres, quienes además de llevarla de paseo le implantaron un chip bajo la piel, el cual dejó una extraña cicatriz. Quizás el recuerdo provenga de una salvaje noche de copas, en la que perdió por completo la cabeza.