Looks de muerte lenta en los Grammy

Destellos y comentarios se hacen presentes con poner tan solo un pie sobre ella. En diversas oportunidades, reconocidas estrellas han vestido maravillas de alta costura que dan paso a expresiones como: “existe un Dios y es bueno”. Pero no todo puede ser perfecto, también se han visto trapos con etiquetas famosas que parecieran ser sacados de algún baúl de los recuerdos: “desastre colosal”.

Sin duda alguna, sea como sea, feo o bonito, horroroso o espectacular, la controversia de las “red carpets” son un most que no se puede dejar de ver ni leer.

Sin más preámbulo, las mejores y peores vestidas de los Grammy 2015:

1. Elegante y conversadora. Katy Perry suele elegir correctamente atuendos que complementan su voluptuosa figura. Esta vez, usando un vestido couture de Zuhair Murad inspirado en un estilo flapper, relució y destacó entre las mejores.

2. La noche de ayer, Lady Gaga decidió asaltar el closet la dama de compañía mejor pagada del mundo. Escotada de pies a cabeza, este diseño de Brandon Maxwell la hizo ver sumamente ordinaria. ¿Qué habrá pasado por la cabeza de Tony Bennett?

3. La cantante del éxito mundial “All About That Bass”, Meghan Trainor, no le tiene miedo a su figura. A pesar de su tremenda personalidad y confianza, esta vez no lo logró. Con un encaje cero delicado y la cortina de “Morticia Addams”, terminó como un disfraz de Halloween. El engendro fue diseñado por Galia Lahav.

4. Kim Kardashian aprovechó el evento para lucir su nuevo corte. Este nuevo edgy look solo podía ser acompañado por algo similar. Jean Paul Gaultier fue el encargado de la bata de baño metálica que usó la esposa del rapero Kanye West. A pesar de lo lujoso del atuendo, al ser tan descubierto restó elegancia a la celebridad.

5. El patinaje sobre hielo nunca se había visto mejor. La dama anaranjada de Hollywood, dejó el tono zanahoria por un bronceado natural luciendo como una persona normal. Aun con problemas de “buen gusto”, la heredera de la fortuna Hilton al menos se ve saludable.

6. Gwen Stefani: perfecta. Su secreto para no envejecer se desconoce, los años pasan y ella sigue intacta. Usar un enterizo es una decisión bastante atrevida. El fitting debe ser perfecto, sin arrugas ni bolsitas. Simplemente bella en Atelier Versace.

7. Esta es la historia de una monja que se escapó de un convento, se perdió en el bosque, la adoptó una familia de pájaros e hicieron de su cabeza un trenzado nido. La moda cut out no es para todos. ¡Muy mal, Iggy! El vestido es de Armani Privé

8. Es difícil juzgarla. Tal vez no sea la mejor elección de vestido, pero hay que recalcar que se gana un buen puntaje por atreverse a usar algo completamente distinto a lo acostumbrado. Con un maquillaje sutil, el abultado vestido Haute Couture de Giambatista Valli causó revuelo en las redes sociales. Quinceañera, cupcake, torta o algodón de azúcar, Balgariri siempre será impactante.

9. La mejor vestida de la noche. Sexy pero no tanto, colorida pero elegante, juvenil pero acorde. Taylor Swift estuvo impecable y acertó en cada detalle de su outfit. Elie Saab fue el encargado del ombre color turquesa y azul con delicadas tiras en la espalda, acompañada de una amplia falda. Para cortar la monocromía, usó unos tacones morados. ¡Bravo!

10. Por último y para rematar, la doña Madonna se puso a torear. Givenchy Couture se encargó de vestir a la controversial cantante de 56 años como una totera erótica. Hay que recalcar que, a su edad, luce increíble. Pero, lamentablemente, ha pasado tanto tiempo desde su época de oro que lo único que logró fue verse ridícula y anticuada. Definitivamente, la peor vestida de la noche.