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Lo bueno, lo malo y lo feo del fútbol venezolano en 2015

Crescensio Salcedo y Ennio Morricone no supieron (ni sabrán) que ambos tienen mucho en común más allá de sus inigualables nombres: compusieron la música de dos cosas que no pueden faltar el último día del año.

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El primero, hizo la opera prima “El Año Viejo”, que el día 31 de diciembre es el track de las lágrimas de todos los venezolanos y colombianos cuando se acerca la medianoche. El segundo, elaboró la canción de un western italiano de los sesenta cuyo nombre sirve de título para el repaso evaluativo de lo que pasó en cada año: “El bueno, el malo y el feo”.

A continuación, aprovechamos esta época de tradiciones para no abandonar una muy popular, la de conocer del fútbol venezolano, cuáles fueron las buenas noticias, las malas y los episodios más feos vividos en el año que se va.

La desastrosa marcha de la Selección en la clasificación mundialista, su tempranera eliminación de la Copa América y las consecuencias de toda la calamidad resultadista que ha generado en el seno del equipo de Sanvicente, invita a pensar que fueron doce meses para olvidar. Y es cierto, pero como me gusta tanto encontrar la parte buena de las cosas, rescataré algunos momentos positivos que quizá no equilibren la realidad del año del retroceso Vinotinto, pero que demuestra que hay elementos para mantener el optimismo.

Lo bueno:

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1. Los títulos de Seijas, Guerra y Túñez: En medio de la turbulenta realidad de la Selección, tres de sus miembros se arroparon con la bandera de Venezuela en las celebraciones de los títulos de sus clubes, coincidencia poco habitual en el fútbol nacional. Luis Manuel con el Santa Fe, siendo uno de los protagonistas rutilantes de la Copa Sudamericana, Alejandro con el poderoso Atlético Nacional de Medellín y Andrés en Tailandia, marcando 17 goles, seguramente un récord en 2015 para un defensor central

2. Baroja, Arteaga y Rivas, al extranjero: Varios futbolistas salieron del país en el año que termina, pero los casos de Alain Baroja, Manuel Arteaga y Gelmín Rivas, destacan. En una posición en la que cuesta más que cualquier otro jugador cruzar las fronteras, el arquero se ganó el traspaso a Grecia por sus notables actuaciones con Caracas, las mismas que sirvieron para hacerse como titular indiscutible en el pórtico Vinotinto. Gelmín Rivas explotó de una buena vez la cisterna de goles y se las llevó al Medio Oriente, donde, sin ser tan noticioso, no ha parado de seguir metiendo la pelota en el arco rival. En el caso del atacante zuliano, su madurez y sus tantos evidenciaron un progreso que le hizo merecedor de una segunda oportunidad en Italia. Llegar con la vitola del “nuevo Batistuta” al Palermo, habla de su brillante momento.

3. Un final inolvidable: Caracas y Táchira definieron el campeón del Torneo Clausura 2015 con todos los condimentos para ser catalogado el partido más apasionante de los últimos tiempos del campeonato nacional. Con un marco de público impresionante y la paz reinando en la grada, la primera transmisión televisiva en alta definición de un choque del fútbol local permitió disfrutar a plenitud todas las emociones que se vivieron aquel domingo en el Estadio Olímpico. El gol de Wilker Ángel en el último minuto fue la guinda de un clásico que quedará grabado en la retina de todos.

4. El juego de Zamora y La Guaira: En medio de las críticas y licencias de los propios equipos adoptadas para disputar el poco trascendente Torneo de Adecuación, dos cuadros se lo tomaron muy en serio y con su juego nos regalaron una batalla encarnizada por el título con propuestas atractivas en el terreno. El Zamora de Franceso Stifano terminó por llevarse el premio mayor mostrando una capacidad ofensiva descomunal, que superó en una gran final la muestra de un fútbol solvente y casi infalible del cuadro guaireño de Leo González.

5. Los goles de Christian Santos: El delantero nacido en Puerto Ordaz sabe explotar su físico en las redes sociales tanto como marcar goles. Artífice del ascenso a la primera división holandesa del NEC Nimega a punta de fabricar tantos, la racha la extendió en la máxima categoría, ganándose a pulso su titularidad en la Selección de Sanvicente, que no estaba convencido de la utilidad del atacante en su equipo. Hoy, nadie discute que fue el venezolano con mejor desempeño fuera del país en todo 2015.

6. La aparición de Yeferson Soteldo: Pulido en la inagotable cantera zamorana, con apenas diecisiete años brotó en un equipo que trataba de no conmocionarse por la salida de Noel a la Selección. Habilidoso, gambeteador, preciso en el pase, veloz. Los conocedores coinciden en que a su edad, solo Stalin Rivas mostró un talento similar. Entiende el juego sin dejar a un lado sus pinceladas con la pelota y además, anota goles: hizo 12. El fútbol nacional se rindió a sus pies y lo decretó el mejor jugador del Adecuación.

7. Las muchachas de nuevo a un Mundial: Venezuela decretó ser potencia en las divisiones menores del fútbol en la rama femenina y lo certificó una vez más al clasificarse al Mundial Sub 20 tras quedar subcampeón en el sudamericano de la categoría disputado en Colombia. La alegría que no brinda el grupo de hombres la regala un puñado de humildes muchachas.

 

Lo malo:

EFE

1. Adiós a Carlos De Castro: En un accidente vial en el que viajaba el plantel de Estudiantes de Mérida, el defensor central y capitán del equipo, Carlos De Castro, fue el más afectado tras sufrir graves lesiones que le cegaron la vida. El dolor se extendió además durante los agónicos intentos por salvarle la vida e incluso luego de su muerte, por la batalla que tuvieron que vivir sus familiares ante la lenta respuesta de la directiva académica para apoyar el traslado del cuerpo del jugador a su Uruguay natal. Un suceso que creó precedente para evitar los traslados en vehículos inadecuados, práctica común en el fútbol de aquí.

2. El regreso de la Cenicienta: El propio técnico lo admitió: “Cometemos errores de 20 años atrás”. El mismo Sanvicente determinó que la Selección regresó a la época de las goleadas, del dolor de las derrotas. El progreso de los últimos 15 años se difuminó en una gestión marcada por las asperezas, por el enredo, por los enfrentamientos y las dudas. “Se perdió el espíritu” decía el más guerrero y capitán de los jugadores, Tomás Rincón. Ocho derrotas, seis en partidos oficiales. Cuatro caídas en cuatro partidos de Eliminatorias con once goles encajados, casi a razón de tres por choque, son las cifras que evidencian la crisis deportiva que atraviesa Venezuela, que se tradujo en una dura pugna entre jugadores sublevados, la FVF y el cuerpo técnico. Las renuncias de Juan Arango y de Fernando Amorebieta, han sido un parte de guerra ocasionado por el mal andar general de todo el proceso Sanvicente. La tensa calma a la espera del nuevo año es la única novedad relacionada ante una perspectiva incierta de resolución del conflicto interno.

3. El adiós de Arango: Circunstancias aparte, la renuncia de Juan Arango a seguir vistiéndose de color Vinotinto fue un punto amargo en medio de la crisis general que se vive en la Selección Nacional. Motor del nuevo concepto del combinado patrio, el maracayero decidió irse en un momento en el que no se sintió motivado para seguir, a pesar de mantener intacto su liderazgo y forma (su función en el equipo durante la Copa América fue notable). La era post Arango ha arrancado de la peor manera.

4. Zamora, el peor de todos: Ningún equipo en los 56 años de historia de la Copa Libertadores había tenido peor registro que el Zamora de este 2015. Todos los partidos perdidos, solo tres goles a favor y 21 en contra. Un lastre demasiado grande para un cuadro que dio un viraje de calidad en el segundo semestre del año. La poca atención a los refuerzos para intervenir en la competencia continental terminó por hacer pagar cara la osadía.

5. La Sub 20, reflejo de la mayor: Una sola victoria (cuando ya estaba eliminado) logró la Selección Sub 20 de Venezuela en el Sudamericano de la categoría que se disputó en Uruguay. Con un grupo de jugadores con importante bagaje, Miguel Echenausi decretó su salida de la dirección técnica tras una deprimente y frustrante presentación. Coletazos de lo que se venía también en la absoluta.

Lo feo:

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1. La caída de Esquivel: Con casi treinta años en su cargo hacía pensar que el presidente de la FVF, Rafael Esquivel, solo saldría del curul el día de su defunción. Sin embargo, un golpe dado por la policía suiza, donde se encontraba el federativo, terminó con el arresto de él y otros seis miembros de la FIFA a petición de la justicia estadounidense, que les acusa de organización mafiosa, fraude masivo y blanqueo de dinero, entre otros delitos. La propia entidad balompédica sancionó a Esquivel, quien hoy está suspendido de cualquier actividad relacionada con ese organismo y permanece recluido en una cárcel helvética, a la espera de ser extraditado a Estados Unidos. Su ausencia ha sido motivo para que muchas cosas hayan cambiado en el fútbol nacional, para bien y para mal.

2. Sin descenso: El reglamento de la temporada 2014/2015 establecía que al finalizar la misma, los dos últimos equipos de la tabla acumulada descenderían a Segunda División. Pues bien, terminó la campaña y Llaneros de Guanare y Portuguesa ocuparon esos puestos. Un “chispotazo” del presidente del cuadro rojinegro en una nota de prensa reveló que la Asociación de Clubes de Primera División ya había tomado la decisión de que ningún equipo bajara de categoría mucho antes que finalizara la campaña. Todos hablábamos en los medios de un descenso imaginario. Una burla.

3. ¿Tucanes, Metropolitanos o JBL?: El desastre del descenso se extendió un semestre más. La poca claridad en los términos reglamentarios del novedoso Torneo de Adecuación provocó que Metropolitanos, en principio, último clasificado de la tabla, apelara su condición de equipo descendido. Un recurso de interpretación del Consejo de Honor de la FVF determinó que sería Tucanes el equipo que bajaba a Segunda División. Por ese motivo, Metropolitanos jugó el repechaje con el zuliano JBL de la categoría de plata y en cancha se ganó el derecho de seguir en Primera. Sin embargo, una alineación indebida de los de Hugo Savarese sirvió para que el cuadro marabino denunciara el caso y ganara el cupo en la categoría de oro. Más de un mes pasó entre todo ese bochornoso enredo. Una cicatriz imborrable para el Consejo de Honor.

4. Complot descubierto: Por si la decisión de Fernando Amorebieta de renunciar a la Selección no fuera lo suficientemente grave, el presidente encargado de la FVF, Laureano González, declaró al diario Líder que luego del anuncio del defensor “vendrán otros casos más”, al tiempo que lanzó más carbón a la llamarada asegurando que entre los jugadores se “configuró un movimiento para sacar al técnico”. Una declaración a todas luces irresponsable, ventilando a los medios un conflicto cuyas magnitudes aún no han podido calcularse.

Se va el 2015 y no lo olvido. No porque me haya dejado cosas buenas, una chiva, una burra negra o una yegua blanca, sino porque debe servir de ejemplo de cómo NO se deben hacer muchas cosas… Y porque tampoco nadie me puede quitar el recuerdo de ver celebrar a un futbolista venezolano un título de Copa Sudamericana o prohibirme que recuerde aquel clásico que definió el campeón del Clausura. Por eso, no lo olvido.

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