De Interés

Aunque la UE aún duda, Putin apoya suspensión de patentes de vacunas

Al igual que Biden, el presidente ruso opina que en la situación actual no se debe pensar en obtener el máximo de beneficios, sino en garantizar la seguridad de las personas

Putin vacunas
Publicidad

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, respaldó este jueves la iniciativa de suspender las patentes de las vacunas anticovid.

«En Europa hay una idea que merece atención: eliminar la protección de la patente de las vacunas contra la covid-19», dijo el jefe del Kremlin en una videoconferencia con la viceprimera ministra Tatiana Golíkova, responsable de comité gubernamental para la lucha contra la pandemia.

La presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, afirmó hoy que Europa está preparada para debatir la suspensión de la patentes de la vacunas anticovid propuesta del presidente de Estados Unidos, Joe Biden.

Según el mandatario ruso, la iniciativa se corresponde con la reglas de la Organización Mundial del Comercio, que prevén el levantamiento de la protección de la protección de la propiedad intelectual en situaciones extraordinarias.

«La pandemia es una situación extraordinaria. Tatiana Alexéyevna (patronímico), le pediría a usted y su colegas estudiar este asunto. Sin duda, Rusia apoyaría este enfoque», dijo Putin.

Lea también: Vacunas sin patentes: ¿qué implicaciones trae para la población y el comercio?

Recalcó que en la situación actual no se debe pensar en obtener el máximo de beneficios, sino en garantizar la seguridad de las personas.

«La seguridad solo puede garantizarse en el caso de que la vacunas sean utilizada en la mayoría de los países. Entonces se conseguirá la inmunidad de rebaño en el más amplio sentido de este concepto», dijo Putin.

Agregó que Rusia es el único país del mundo que transfiere tecnologías a otros países para la producción de vacunas anticovid.

«Es un práctica que ya funciona. Está en marcha. En algunos países ya se ha organizado la producción de nuestra vacuna con transferencia de tecnologías», subrayó el presidente de Rusia.

Los que se oponen

A pesar de que la suspensión de patentes tiene el visto bueno de Putin y Biden, cuyos países fueron los primeros en crearlas, las farmacéuticas y la Unión Europea rechazan la idea. La mayoría alega que con o sin patentes, el proceso de vacunación sería igual de extenso.

Hoy la Comisión Europea se pronunció ante sus declaraciones: «La UE está a la vanguardia de las entregas de vacunas eficaces al resto del mundo. ¡Hasta ahora, más de 200 millones de dosis! Tanto como se han entregado a los europeos», publicó en Twitter la presidenta del Ejecutivo Comunitario, Ursula Von der Leyen, quien agregó que Bruselas está dispuesta a debatir esa y otras propuestas.

Sin embargo, Von der Leyen instó «a todos los países productores de vacunas para que permitan la exportación de inmediato y eviten medidas que interrumpan las cadenas de suministro», en una referencia velada a las casi inexistentes entregas de dosis de Estados Unidos a otros países.

Fuentes europeas explicaron que una liberalización de patentes tardaría al menos dos años en hacerse efectiva a través de la Organización Mundial del Comercio. También apuntaron que los grandes beneficiados serían dos grandes potencias como China e India, ya que se aprovecharían de la tecnología «revolucionaria» del ARN mensajero (ARNm), que supone una «ventaja competitiva» que hay que «preservar».

En todo caso, la Comisión Europea y otras instituciones mantienen que liberalizar las patentes no es la «varita mágica» que resuelva el problema, sino que es necesario aumentar las donaciones de dosis, reducir las restricciones a la exportación y aumentar la producción mundial.

Alemania e Italia

Aunque las reacciones escasean, Alemania e Italia tienen opiniones encontradas. Por una parte, el ministro de Exteriores de Alemania, Heiko Maas, se mostró escéptico en una reunión con la Asociación de la Prensa Extranjera (VAP): «Naturalmente tenemos que hablar de ello porque hay que examinar todas las salidas posibles en la situación en que nos encontramos. Pero necesitamos soluciones rápidas y no creo que esa sea una solución rápida», dijo Maas.

«La prioridad debe ser aumentar las capacidades de producción ya existentes», agregó.

Maas dijo además que no tendría sentido liberar las patentes para ponerlas en manos de empresas que le dan prioridad al ánimo de lucro.

El Gobierno alemán considera que el camino para que las vacunas lleguen a todas partes pasa por la iniciativa Covax.

En el caso italiano, el ministro italiano de Sanidad, Roberto Speranza, señaló que «el avance de Biden sobre el acceso libre a las patentes de vacunas para todos es un importante paso adelante».

Las empresas farmacéuticas

La Federación Internacional de Fabricantes y Asociaciones Farmacéuticas lo ha calificado «decepcionante»; y aboga por otras medidas, como «la eliminación de barreras comerciales o de cuellos de botella en el suministro de materias primas». Además el anuncio de EE.UU ha llevado a las farmacéuticas a caer en Bolsa, algo que influye aún más en la industria.

Por otro lado, el grupo de Investigadores y Manufactureros Farmacéuticos de EE.UU (PhRMA), asociación que engloba fabricantes como AstraZeneca, Pfizer y Johnson & Johnson -fabricantes de vacunas contra la COVID-19- advirtió que la propuesta «debilitará aún más las cadenas de suministro y alimentará la proliferación de vacunas falsificadas».

Para remarcar la complejidad del proceso de producción, Pfizer señaló que su vacuna, que se desarrolló con el laboratorio alemán BioNTech, requiere 280 componentes de 89 suministradores diferentes ubicados en 19 países.

El consejero delegado de Pfizer, Albert Bourla, dijo esta semana a la CNBC que la propuesta que tiene que discutirse en la Organización Mundial de Comercio «no tiene ningún sentido». Señaló que no hará «nada» por facilitar la manufactura de las vacunas en países en desarrollo que «carecen de la infraestructura necesaria». Además criticó lo que esto desincentivaría a la industria ante futuras pandemias.

Caso aparte es Moderna, que aseguró este jueves que su negocio no se verá afectado por una posible suspensión de las patentes. Sin embargo, al igual que las otras farmacéuticas duda de que la medida pueda ayudar a mejorar el suministro de dosis.

«Creo que no cambia nada para Moderna», dijo el consejero delegado de la firma, Stéphane Bancel, quien recordó que su empresa ya dijo el pasado octubre que no va a forzar a que se respeten sus patentes relacionadas con la covid-19 durante la pandemia.

Con información de efe

Publicidad
Publicidad