En TV se escuchó y vio con dificultades todo el show, pero lo que no se transmitió generó más críticas de lo esperado: ¿Hubo nominados que no dejaron pasar al evento? ¿Qué pasó con la presentación de Corina Smith? ¿Por qué el discurso de Jerry Di se viralizó? ¿Cuántos ganadores hubo? Aquí te contamos
“Premiaciones innecesarias”, “Una ventana para exponer a los artistas del país”, “Estoy aquí por el chisme”, “Mejor que los haga Coca-Cola”: los premios Pepsi Music siempre dan de qué hablar, especialmente en redes sociales. Basta con revisar la etiqueta del evento para ver críticas u opiniones que generan controversia, pero que al final cumplen el objetivo: hacer tendencia.
El Estímulo asistió al evento y en esta nota responde lo que no se vio ni se escuchó en TV nacional: ¿Qué tal estuvo el sonido? ¿Qué pasó con la producción? ¿Eran tan pocos las categorías a premiar? Aquí respondemos varias preguntas.
No. Los Pepsi Music solo televisaron la entrega de los ocho premios más importantes: artista femenino (Daniela Barranco), artista revelación (3AM), artista refrescante (Reggi “El auténtico”), video décima edición (Jerry Di), tema décima edición (Servando y Florentino), disco décima edición (Lasso), artista décima edición (Lasso) y artista de la década (Servando y Florentino.
¿Qué pasó con el resto de nominados? Los galardones del resto de categorías los entregaron durante la alfombra azul. Durante el show, cuando se dejaba de transmitir, también aparecían los ganadores en dos pantallas laterales al lado de la tarima.
¿Era lo ideal? No. Los nominados no tenían oportunidad de saber si perdían porque la mayoría no estaba pendiente de ver las pantallas o escuchar lo que decía la “voz guía” cuando el show iba a corte, sino que se paraban a saludar o conversar. Es decir, si tenías la ilusión de ganar, a lo mejor te enterabas tarde de que no fue así.
¿Cómo conocer todos los ganadores? Se puede consultar la cuenta en Instagram de Pepsi (@pepsiven).
«De pésimo a regular», al menos eso es lo que se repite. Si algo tuvo críticas duras durante el show, fue eso: el sonido.
No importaba si estabas adentro de la sala del teatro o viéndolo por TV: no se escuchaban bien los instrumentos ni las voces de los cantantes.
Esto es algo importante a considerar porque la sala Ríos Reyna tiene la particularidad de haber sido construida para que el sonido se escuche nítidamente, por lo menos para el público presente.
Desde el inicio, el bajo se escuchaba más alto que las voces, lo mismo pasaba con los instrumentos. Sin embargo, también hay que reconocer que fue algo que se intentó controlar a medida que avanzaba el show. Por ejemplo, durante la presentación de Piso 21 – agrupación internacional invitada -, el sonido mejoró considerablemente.
¿En TV sonó peor? Es posible. Cada cámara de televisión cuenta con micrófonos propios que al no ser bien calibrados pueden ocasionar ruidos fuertes y molestos, iguales a los golpecitos que algunos reportaron haber escuchado en Twitter.
Si algo tuvo un control absoluto, quizás por ser el espacio que era – el Teatro Teresa Carreño-, fue el show de luces, humo y fuegos artificiales de la tarima. No hubo accidentes durante la presentación de los cantantes y sobre todo, existió coordinación con la música y el estilo de cada artista.
El complemento del resto de elementos, sin duda, fueron las animaciones que se hicieron para cada presentación. Ninguna falló y se reproducían en pantallas que permitían apreciar cada ilustración y al artista en paralelo desde los palcos más altos, algo bueno si consideramos que habrían al menos 2.000 personas presentes.
Sí y por decisión logística. Enredes sociales, varios de ellos lo dejaron claro: «La producción de Pepsi no me dejó entrar».
Una de las nominadas era Neisser Banout, una comediante local, fue una de las personas que no entró: «Resulta q ayer fui a los pecsi y yo tenía mi entrada de nominada y nunca me la dieron, así que no pude entrar (me dejaron por fuera pues) pero no importa porque luego hicimos un show increíble en pijamas».
¿Qué pasó? Neisser explicó que sus compañeros llegaron primero y dejaron su entrada con protocolo para cuando ella estuviera en el lugar, pero ninguno le dio el pase y no entró.
Lo mismo ocurrió con los acompañantes de los cantantes Big Soto y Neutro Shorty. La novia de Soto, Nicole Amado, dijo en Twitter: «Por fin puedo viajar a Venezuela para ver un show de Big Soto y la súper producción de los @PepsiVEN no me dejaron pasar a verlo, menos mal duermo con él, si no imagínate».
Manira, la novia de Neutro Shorty, también reaccionó a la situación en la red social: «Comparto el mismo sentimiento» y agregó que todavía quedaban puestos vacíos.
Ninguno de los cantantes se presentó a la alfombra azul y tampoco se quedaron hasta el final del evento.
Soto no se pronunció sobre el caso de Nicole Amado, pero expresó que la producción no dejó que su equipo hiciera el trabajo: «(…) siempre he pensado que no valoran lo suficiente nuestro trabajo, allá ellos (…)».
No es personal, lo dice la audiencia: el playback de Corina Smith fue de las cosas más evidentes y criticadas de la noche. Su performance fue una sorpresa, pues ella no estaba en la lista de presentaciones en vivo.
Y si bien tenía un equipo de músicos acompañándola, la pista se escuchaba más alto que sus intentos por hacer el público notara la melodía de sus instrumentos. Nervios u otro desliz de la producción de sonido, su doblaje se notó incluso en los palcos más lejanos de la sala.
Sí. Sin embargo, para varios usuarios de redes sociales, resultó necesario un homenaje más extendido para los músicos, compositores, cantantes y otros miembros de la industria cultural y musical venezolana, en especial para Aquiles Báez, quien falleció hace unas semanas en Alemania.
En otras palabras: «Eso faltó».
Aunque inesperado, se apreció la carga de honestidad en las palabras de dos de los ganadores, específicamente de Reggi «El auténtico» y Jerry Di.
El primero fue Reggi, que recibió hace dos días cinco nominaciones al Grammy Latino y ganó el premio Pepsi en la categoría «artista refrescante» como interprete, y dijo: «Se lo dedicaría a mi disquera, pero no han hecho nada por mí. Por eso se lo dedico a mi mamá y mi hija».
Mientras que Jerry Di, un cantante de reggaeton con años de trayectoria nacional e internacional, remató con un discurso reflexivo que se viralizó en redes sociales: «A todos los que dijeron que no, a todos los que trancaron la puerta, a todos los que dijeron que no se podía, a los que dijeron que era imposible y que la gente de Catia no logra nada. Por todas las malas personas que hay en nuestra vida y todas las malas personas que vendrán: les dedico este premio Pepsi».
Ambos recibieron vítores y de una levantaron comentarios en la sala, especialmente para los que conocen sus historias dentro de la industria musical.
Parece que sí. A pesar del sonido, quien compró entradas vio y escuchó un show decente y en vivo de parte de los artistas que estaban incluidos en la lista de presentación.
La entrada al show televisado con la Sinfonía Desordenada fue solo un inicio potente para lo que vendría y no se dice por decir: se notó en la euforia y los aplausos, en especial cuando fue el turno de Servando y Florentino, Lasso, Jerry Di, Big Soto y Piso 21, quienes quizás fueron los que hicieron que más público pagara por estar allí.
El objetivo se logró: que todo el quisiera, bailara y brincara en su puesto con un espectáculo variado.
«¿Por qué siguen haciendo los Premios Pepsi Music?», esa pregunta se repite luego de 10 años de haberse creado el evento e intentar complacer a unos espectadores exigentes. La conclusión, al menos para quien escribe, es que la respuesta es profundamente personal. Más bien, vale la pena preguntarse: ¿qué ofrecen estos espacios a los cantantes emergentes?
Mucho o poco, todo depende de la perspectiva de cada artista. Sin embargo, el evento desde sus inicios ha sido un punto de encuentro para talentos veteranos y nuevos, especialmente para aquellos que iniciaron su camino en la industria musical siendo inmigrantes.
Son los mismos artistas quienes reconocen y comentan lo que el evento significa: «Más que el premio, lo interesante es poder conectar con otros y apoyarlos».
Con otros pueden referirse a artistas con estilos, pensamientos, ideas, gustos y formas diferentes o parecidos, que al final terminan haciendo el mismo aporte: crear caminos en una industria cultural que desfallece.
Pero también evidencia lo que ya debería ser obvio: el mundo cultural no lo conforman ni lo mueven únicamente famosos, sino las personas que, detrás de escena, intentan innovar y trabajar en un país cuyo entretenimiento se quedó anclado al pasado.
«En fin, la hipocresía»
«La que veo que se presenta con pista»
«No representan el verdadero talento venezolano»
Una grosería al aire
Un evento para aprender a bailar
Otra vez el sonido
Prendiendo el Teresa Carreño
«Celebrar la música venezolana?
«Tratando de apoyar»
«Servando y Florentino dando clases»
«Es diferente cuando estás adentro»
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