De pender de un hilo a ganar cómodamente en tiempo extra, el Bayern de Múnich de Pep Guardiola llega a cuartos de Champions League con el impulso que da la remontada, pero con muchas dudas que Juventus no supo, o no pudo, aprovechar. Precisemos algunos puntos de este 4-2 mentiroso.
7– Con Guardiola, el Bayern ganó en posesión pero perdió en derroche. No es una máquina como otrora y contra la Juventus demostró que si estuviera obligado a recordar a aquella máquina de Jupp Heynckes, perdió el libreto. Tal vez con un Messi o Neymar, la historia sería diferente.
6- Es obvio que después del Barcelona, este Bayern es el rival menos deseado en un sorteo. Pero la eliminatoria, y el buen sabor que dejó la Juventus (¡ay si aquella jugada de Cuadrado hubiera finalizado en gol!), ha mermado esa imagen de equipo indestructible que le acompañaba al inicio del torneo. Ello, más las diferentes diferencias del entrenador con sus dirigidos, asoman cierta debilidad anímica.
5- Como consecuencia del punto anterior, y después de observar cómo Barcelona a medio tren decidió su clasificación, se concluye que el equipo de Luis Enrique es más favorito para llevarse la Champions League.
4- Para encarar la recta final de la Champions se necesita un portero que genere confianza. Que lo diga el Real Madrid, por ejemplo. En el primer gol de la Juventus hay una gran displicencia de Neuer. Su salidas fuera del arco, ya sabemos, son capaces de hacer temblar el planeta marte. Jugadores de pie educado como Messi, Neymar, Cristiano Ronaldo, James, Griezmann o el propio Agüero pueden frotarse las manos ante estas pifias.
3- ¿Qué pasa si Guardiola se encuentra a otro Morata? Mientras estuvo en el campo, Bayern vivió bajo peligro inminente. Con algo tan sencillo como esperar el error, el español pivoteaba y servía de manera magistral a sus compañeros. El 2-0 fue maradoniano. Guardando las distancias, es fácil imaginar el infierno que podría vivir el estratega si en el camino choca con el PSG de Ibrahimovic y Di María.
2- Pero el Bayern es el Bayern. No cualquier equipo luce con tanta entereza para empatar cuando restan 14 minutos y enfrente tiene a un rival italiano (y no cualquier italiano). Si el equipo alemán es capaz de sacar diferencia es porque ahí están los Lewandowski, Müller y compañía. Aunque la remontada tuvo como gran protagonista el derroche de adrenalina de Kingsley Coman (asistencia para el empate y golazo para la sentencia).
1- Nunca des por muerto a un alemán. Ya lo dijo Gary Lineker cuando definió el fútbol actual.
El Borussia Dortmund y el Valencia, que comenzaron perdiendo sus respectivos partidos de la cuarta fecha de la Liga de Campeones, acabaron ganando al Inter de Milán (3-2) y al Lille (4-1) respectivamente, colocándose en posición ventajosa para acceder a octavos de final
Mientras tanto, el Real Madrid de Zidane buscará una victoria obligatoria contra el Galatasaray de Turquía, en el “infierno” de Estambul.
El Bayern de Múnich goleó 7-2 al Tottenham, vigente subcampeón continental, con una exhibición del joven extremo germano Serge Gnabry, autor de cuatro goles este martes en Londres.
