A veces la Federación Venezolana de Béisbol pasa desapercibida. El Clásico Mundial 2017 es un ejemplo. Al consumarse la eliminación de la selección nacional, pocos recordaron al ente. Las acusaciones de la mayoría de los fanáticos cayeron en Carlos Guillén, gerente general y cabeza del Comité Operativo, así como en el mánager Omar Vizquel. Ninguno llegó allí por obras y gracias bíblicas. Ambos fueron nombrados por la institución, intervenida a mediados de 2013 por el Ministerio del Deporte.
Colocar a los hombres de mayor autoridad del combinado fue la única labor de Fevebeisbol. Armar el róster y la elección de los jugadores definitivos fue un trabajo en conjunto entre el cuerpo técnico y el Comité Operativo. Entonce, ¿cómo evalúa el organismo el desempeño de las personas que escogió para comandar la expedición en el torneo internacional? A primera vista, y aunque los resultados no fueron favorables, de manera positiva.
“Yo creo que todos hicieron su trabajo. Por lo menos, Carlos (Guillén) estuvo atento con las diligencias que requieren mover a un gran equipo. Siempre estuvo pendiente de los jugadores y llevó con mucha atención todo lo que sucedía”, dijo Edwin Zerpa, presidente de la FVB y quien acompañó a la representación venezolana durante los cuatro encuentros realizados en Jalisco. “Vizquel también hizo lo correcto, lástima que las cosas no le salieron en el campo”.
A diferencia del fútbol, las selecciones de béisbol con peloteros profesionales no tienen atenciones constantes. Después de un Clásico, en los próximos tres años los movimientos e informaciones desaparecen. No obstante, y si Zerpa está contento con lo realizado por Guillén y Vizquel, es válido preguntar si los ve a la cabeza del grupo que llevará la bandera tricolor en 2021. El directivo no tuvo titubeos para responder.
“Yo pienso que sí”, expresó. “Vienen elecciones (en Fevebeisbol), en junio, pero en caso de que continuemos hay que darles una segunda oportunidad”. De ser relecto, el venidero Clásico será el quinto para la administración de Zerpa, quien tiene cinco elecciones ganadas y más de 30 años involucrado con la institución que rige al béisbol amateur del país.
¿Qué factores ve la federación que hayan afectado la actuación de Venezuela, selección que solo pudo vencer a Italia, dos veces, en los siete careos que disputó? “Yo creo que nuestro problema fue la falta de motivación. Fue un equipo con mucha apatía en el campo. Al principio vi muchachos con entusiasmo, pero después no se reflejó en el terreno de juego”, comentó. “A nuestros grandeligas hay que ponerlos como otros seres naturales más. También el entrenamiento. Solo un par de juegos antes de la competencia y ya… Más bien esos muchachos hicieron demasiado”.
Las razones de Guillén, sobre el fracaso de la tricolor, no tocan los ánimos en el clubhouse; por el contrario, el gerente le señaló al programa El Infield, de Deportes Unión Radio, que estaba contento por “la integración en el dugout, desde que comenzaron las prácticas en Florida”.
“Yo pienso que influyeron varios factores”, le explicó Guillén a los periodistas Carlos Valmore Rodríguez, Efraín Zavarse, Humberto Acosta y Freddy Chersia. “El pitcheo abridor estuvo mal, lo sabíamos desde el principio. Félix Hernández estuvo muy bien, pero hubiera sido diferente si contábamos con al menos otras dos piezas, entre Carlos Carrasco, Eduardo Rodríguez y Junior Guerra. En la segunda ronda tal vez no se bateó mucho, pero siempre se dijo que el pitcheo era la clave. El formato favoreció a Estados Unidos por su capacidad de reserva en el pitcheo. Tuvieron más lanzadores disponibles en la reserva”.
En caliente es difícil encontrar soluciones, pues los ejecutivos y el cuerpo técnico todavía diagnostican los problemas que desembocaron en el desastre. Sin embargo, Zerpa quiere que el próximo grupo que compita en 2021, también pueda ser parte del Ciclo Olímpico para los Juegos de Tokio 2020. Eso es más que improbable. Major League Baseball no se siente cómoda para darle permiso a los jugadores de representar sus países natales, ni siquiera en el Clásico Mundial, un torneo organizado por la oficina de Nueva York.
“Entonces es mejor que eliminen de una vez el Clásico”, respondió Zerpa. “Creo que ese ciclo es necesario para toda selección que desee estar en el tope del mundo, porque si no es probable que países como Venezuela continúen sin buenos resultados. Entonces es preferible no asistir”.
La otra solución que pondera Zerpa es buscar diagnósticos a puertas afuera. “Pienso que debería organizarse un foro de periodistas especializados, técnicos y jugadores que puedan aportarle a la selección”, soltó. “La idea es buscar en dónde está el problema de Venezuela. Encontrar qué es lo que sucede allí”.
Ya son cuatro Clásicos Mundiales en la historia. Venezuela todavía busca la fórmula de encarar la competencia.