Nadal ganó el Roland Garros con el pie dormido pero sabe que no puede seguir así
El tenista español piensa en un probable retiro. Aunque no descarta jugar en el próximo torneo de Wimbledon, asegura que dependerá de su cuerpo. No está dispuesto a anestesiar el pie otra vez
El tenista español Rafael Nadal, ganador el domingo 5 de junio de su 14º Roland Garros, declaró en conferencia de prensa que «en las circunstancias actuales no puedo y no quiero seguir jugando» por los dolores que sufre desde hace años en su pie izquierdo.
Nadal logró jugar con el pie dormido para evitar que el dolor le impida jugar.
«Competí porque mi médico me administró inyecciones de anestesia en los nervios para dormir el pie. Pero es un riesgo. En las condiciones actuales, no puedo y no quiero seguir jugando hasta encontrar una solución».
«Lo que tengo en el pie no ha empeorado, pero cuando juegas con una parte de tu cuerpo pueden derivarse otros problemas físicos y ese es un riesgo que no quiero asumir», agregó después de la final que ganó al noruego Casper Ruud por 6-3, 6-3 y 6-0.
«Era la única forma de poder competir aquí, un riesgo que quería tomar para jugar aquí, pero no un riesgo que quiera tomar en el futuro», añadió en la primera parte de la conferencia de prensa en inglés.
Nadal piensa en el retiro
Tal como ha dicho en varias ocasiones durante la quincena parisina, Nadal recordó: «Jugar al tenis es una de mis prioridades, pero no está por encima de ser feliz en mi vida».
«Si no me siento competitivo no soy feliz, no es cuestión de ganar o no más títulos, solo de poder hacer lo que me gusta, que es jugar al tenis», añadió Nadal.
Sobre sus próximos objetivos en la pista, Nadal no descartó jugar en Wimbledon, pero según las condiciones. «Estaré allá si mi cuerpo me lo permite. Wimbledon es una prioridad, los Grand Slam son una prioridad. Jugarlo con antiinflamatorios sí, con inyecciones de anestesia no».
Nuevo tratamiento
Nadal reveló que la semana próxima probará un nuevo tratamiento para intentar solucionar el problema del pie, el síndrome de Müller-Weiss que sufre en un hueso del pie desde hace años y que le provoca fuertes dolores crónicos.
«Es una intervención en los dos nervios que me han ido bien y me han quitado el dolor, que consiste en una inyecciones con radiofrecuencia pulsátil que me podrían ayudar a disminuir la sensación en el pie», explicó ya en español.
El objetivo es repetir «la sensación que tengo ahora jugando, no de esa manera tan exagerada porque ahora lo tengo completamente dormido, pero desinhibir el nervio, quitar esa sensación de dolor tan permanente».
Para que «a través de este tratamiento, dejar el nervio tocado, medio dormido y tener esa sensación más permanente, que me deje el pie con menos sensibilidad, pero el objetivo es que disminuya mucho el dolor».
En el caso de que no funcione este tratamiento, Nadal admitió que «será el momento de hacer un planteamiento de vida, pero eso me lo reservo para mí, ver si compensa o deja de tener sentido».
En referencia a una posible operación para colocarle una prótesis en lugar del hueso que tiene dañado, Nadal respondió: «Tampoco me aseguraría del todo el poder seguir y debería tomar (esa decisión) con mucha calma, es una decisión de vida que ahora mismo no estoy preparado para tomar. Un año parado (para la recuperación) sin una seguridad… no puedo contestar».
El revés cruzado
Gran parte de la conferencia de prensa se centró en los problemas físicos de Nadal, pero éste también se refirió al partido y a su rival.
«Hoy las condiciones de pista eran mucho más favorables (con sol y pista sin cubrir) y sentía que era un partido que si jugaba bien, dependía más de mí y lo he conseguido».
«La clave hoy fue mi revés cruzado, que hizo mucho daño a Casper, porque fui capaz de abrir la pista y hacerle jugar en una pista más grande. Y jugué muy sólido, con pocos errores, teniendo el control del punto», explicó.
«Casper es un gran jugador. Está cuarto en la ‘race’ (clasificación de 2022), muy alto en el ranking, mejorando cada año porque antes era solo un gran jugador de tierra y ahora gana títulos y lucha por torneos en otras superficies. Estoy seguro que está orgulloso de las cosas que está consiguiendo», declaró sobre su rival.
Y concluyó admitiendo que el título es «muy emotivo y de alguna manera inesperado» por su escasa preparación y sus problemas físicos, «jugando bien desde el principio, mejorando cada día y jugar un a buena final».
Toda la trayectoria de Rafael Nadal ha estado marcada no solo por los éxitos, sino también por las lesiones, especialmente en los últimos años, en los que apenas ha podido competir
Durante un entrenamiento ocurrido ayer 12 de abril, la atleta se lesionó el pie izquierdo, lo que la inhabilita para los Juegos Olímpicos de julio y agosto