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[Video] Bocha Batista, DT de la Vinotinto: "Hoy me siento un venezolano más"

En esta entrevista distendida con El Estímulo, el argentino cuenta como es su día a día, lo que le preocupa y lo que más disfruta de dirigir a una selección que nunca ha asistido a un Mundial de mayores

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Es un tipo muy sencillo. No importa que su hermano sea todo un campeón del mundo y su hija sea la novia de Kevin Mac Allister, flamante fichaje del Royal Saint Gilloise por este verano. Tampoco vive a la sombra de ellos porque hace rato se ha labrado un nombre propio.

El apellido Batista siempre se relaciona con los campeones del mundo del 86 y hay muchos quienes confunden al Checho, Sergio, el que obtuvo el título, con su hermano menor, Bocha, Fernando, seleccionador nacional de Venezuela. Hoy Checho cumple una labor de ayuda de Bocha y las luces están más puestas sobre el menor que el mayor de los hermanos Batista.

Sin el ánimo de enredar ni generar un trabalenguas, El Estímulo presenta la faceta más familiar de Fernando Batista, el Bocha para todos, seleccionador nacional Vinotinto. Un hombre muy sereno, serio, cercano. Puntual, de discurso pausado y sin rodeos, pero prudente. Tiene en sus hombros el peso de la confianza de todo un país para que lleve a Venezuela por primera vez a un mundial de fútbol. Él sabe de tamaña responsabilidad y no le huye, pero nunca asegura que lo va a lograr sino que hará “todo el esfuerzo posible”.

Hace rato que aquello de que los argentinos son pedantes ha dejado de tener sentido. Éste es como todos: amable, educado, muy atento, cercano, respetuoso. Se nota en sus ojos que quiere vernos a todos con confianza, pero que tampoco habrá preferencias con nadie. Tenía dos meses tratando de hablar con él y creo que él no lo sabía. Nunca se quejó del tiempo de la entrevista. Al contrario: siempre fue abierto a contestar todo lo que le formulé.

Esta es la historia de un hombre tan sencillo como importante. El cargo más representativo del país después del presidente de la República lo tiene un hincha de Argentinos Juniors. Un hombre cuya máxima responsabilidad en su carrera la tiene ahora y que prefiere no hablar de sus recientes vínculos con un tipo ya non grato en Venezuela como José Pékerman.

Le gusta cuidar su físico. Con 52 años su apariencia refiere su buena alimentación y el ejercicio. Le gusta correr pero tiene los meniscos rotos. Su jefe de prensa personal es un chamito, pero hijo de un monstruo del periodismo argentino como Marcelo Benedetto. No tiene idea de las realidades económicas del país porque saben protegerle, pero está consciente de ellas.

Presentamos el lado más humano y divino de Fernanto Batista, el Bocha.

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