Un reporte de Econométrica señala -utilizando las cifras de Sudeban- que en el caso de las tarjetas de crédito se observa una caída interanual en términos reales de 7,5%.
“Es muy probable que ya los tarjetahabientes comiencen a sentir el efecto de subir su saldo de crédito a ritmo de la inflación, mientras su salario no hace lo mismo”, dice la firma en su Pulso Semanal.
Ejemplifica con el caso de una persona que hace un año ganaba Bs 15.000 mensuales y que con una deuda de tarjeta de crédito de Bs 100.000, dedicaba el 28% de su salario al pago de cuota mínima. Si el salario fue incrementado a ritmo del salario mínimo (74,6%) y aumentó su saldo de deuda a la velocidad de la inflación (150%), esa persona estaría ganando Bs 26.190 y su deuda sería Bs 250.000. En ese caso la cuota mensual representaría 40% de su ingreso mensual.
De acuerdo con el comportamiento de este segmento de la cartera crediticia de la banca, Econométrica estima que aquellos tarjetahabientes con una alta relación (cuota mensual / ingreso mensual) muy probablemente estén limitando su nuevo apalancamiento, o peor aún, podrían estar incumpliendo con el pago de la cuota mensual correspondiente.
No obstante, señala que esa posibilidad luce limitada por cuanto la morosidad del sistema financiero se mantiene muy bajo, de 0,43% de acuerdo con la data de la Sudeban de junio.