Las nuevas previsiones son más pesimistas que las dadas por los economistas en un sondeo similar hace una semana, cuando proyectaban una contracción económica de 3,05% y una inflación de 9,91%.
Las proyecciones figuran en el Boletín Focus, una publicación semanal del Banco Central que incluye una encuesta realizada a un centenar de expertos de instituciones financieras privadas sobre el estado de la economía nacional.
Los analistas también empeoraron sus previsiones para 2016, para cuando esperan una contracción económica de 1,90%, por encima de 1,51% que calculaban hasta hace una semana, y una inflación de 6,46%, igualmente mayor que 6,29% que proyectaban hace siete días.
De confirmarse las proyecciones, además de sufrir la mayor caída desde el descenso de 4,35% registrado en 1990, el Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil encadenará dos años consecutivos de crecimiento negativo por primera vez desde 1948.
Esta fue la décimo séptima semana consecutiva en que los analistas empeoraron su proyección para la contracción de la economía brasileña este año y reforzaron la previsión de que Brasil se hundió en una grave recesión.
Los economistas, que también se mostraron más pesimistas sobre el comportamiento de los precios tanto en 2015 como en 2016, prevén que Brasil sufrirá en 2015 la mayor inflación desde 12,53% medido en 2002.
La nueva previsión para la inflación este año supera en casi tres puntos porcentuales y medio el techo máximo tolerado por el Gobierno.
La meta de inflación del país es de 4,5% anual, con un margen de tolerancia de dos puntos porcentuales, lo que permite que llegue a un máximo de 6,5%.
Brasil terminó 2014 con una inflación de 6,41%, por encima de la de 2013 (5,91%) pero por debajo del techo tolerado por el Gobierno.