Un recorrido realizado por El Estímulo constató que en los supermercados reina la incertidumbre: ni los empleados ni los clientes saben qué rubros llegarán, y con el método de compra establecido por el terminal del número de cédula, se hace más complicado el proceso de adquirir bienes esenciales.
En el Central Madeirense del Centro Comercial Multiplaza Paraíso, en la segunda semana del mes, han llegado productos regulados como harina PAN, aceite marca Mazeite, toallas sanitarias y champú. Todos se vendieron por número de cédula a excepción de las toallas íntimas, que como llegaron en gran cantidad, pudieron venderlas sin regulación.
Según un trabajador del lugar, el desabastecimiento no ha disminuido y hay alimentos que no se vieron más en ese establecimiento. «Aquí más nunca llegó leche en polvo o café. El otro día los trabajadores tuvimos que irnos corriendo porque en Unicasa llegó leche. Aquí les da miedo que lleguen los productos porque hay mucha gente y a veces se dan problemas», explicó.
En el automercado Supremo, ubicado también en El Paraíso, un empleado aseguró que en los primeros días de este 2016 no se han visto tantos productos. «Ayer llegó harina y aceite, pero no sabemos qué más va a llegar y cuándo», dijo. El trabajador aseguró que por el resto del día miércoles no venderían nada regulado y pidió a quienes esperaban afuera que se retiraran, sin embargo, esa misma tarde llegó papel higiénico.
En el este de Caracas los supermercados están en la misma situación. El Excelsior Gama de Santa Eduvigis no ha recibido suficientes productos regulados en los últimos días, para atender la enorme demanda que se ha presentado.
En el Automercados Plazas llegaron en la semana leche en polvo y jabón de baño y este viernes recibieron arroz y café.
Por su parte, en los supermercados del gobierno, o intervenidos por él, tampoco hay variedad ni gran cantidad de productos regulados.
El Pdval de la avenida Panteón reinició actividades el pasado jueves 7 de enero y los residentes de la zona aseguran que desde ese día solo ha llegado carne, pollo y harina.
En el Abasto Bicentenario de San Bernardino, el fin de semana pasado vendieron solo detergente marca Ariel y leche en polvo.
En Practimercado DíaDía, el miércoles solo llegó harina a la sede de El Paraíso en la plaza Washington.
Representantes del sector consultados por El Estímulo aseveraron que el suministro de mercancía está peor que el año pasado. «Muchas empresas no han abierto y menos despachado», señaló un empresario que prefirió reservar su identidad.
Los consumidores han sentido que las colas han aumentado y es menos lo que se consigue cuando se logra entrar el comercio. «Ahora uno hace una cola de horas y lo que alcanzas a comprar es tan poco que no vale la pena», dijo una cliente.
Una habitante de la populosa barriada de Petare, indicó que ahora consigue menos productos que hace tres semanas y las colas para tratar de adquirirlos son mucho más largas.