1.000 millones de dólares cuesta el "arreglo" de Venezuela

Si en alguna política económica ha sido consecuente el Gobierno de Maduro en los últimos meses es en la de sacrificar grandes volúmenes de dólares con el fin de crear la sensación de estabilidad cambiaria. La ilusión que algunos tienen sobre que «Venezuela se arregló» pasa por mantener de forma artificial un dólar que no sobrepase los 5 bolívares al cambio, y eso lo ha conseguido el Banco Central al inyectar más de mil millones de dólares a la banca para presionar a la baja el precio de la divisa.

En la teoría se habla de inyección de divisas al sistema bancario, en la práctica es quemar dólares. Es como si el gobierno agarrara una parte de las reservas internacionales, las bañara con gasolina y les tirara un fósforo. Y así, el dinero que estaba ya no existe

¿Por qué el gobierno hace esto? Por dividendos políticos señalan algunos. ¿Cómo lo hace? Simplemente transfiere las divisas desde el Banco Central de Venezuela a las cuentas de la banca nacional para que se encarguen de colocar este dinero en sus mesas de cambio. Y así aumenta la oferta de divisas. Es verdad que logra que el tipo de cambio se mantenga entre 4 y 5 bolívares por dólar, pero paga un precio muy alto.

Un gasto millonario

La última inyección de divisas del Banco Central al sistema financiero fue el lunes 11 de abril. A pesar de ser una semana corta para la banca, al no laborar el jueves y viernes por feriado de Semana Santa, el Gobierno inyectó 60 millones de dólares y 26 millones de euros, lo que equivale a un total de 88,3 millones de dólares.

Los bancos deben vender estas divisas en 4,81 bolívares por euro, y 4,42 bolívares por dólar. El precio de venta es menor al de la semana pasada en 1,23%, y representa un aumento sostenido de monto en las intervenciones. Esta semana el monto que el BCV colocó en la banca subió 8,74%, respeto a la semana anterior, según señala el portal financiero Banca y Negocios.

¿Cuánto dinero se ha inyectado al sistema?

En lo que va de año, el total acumulado por intervenciones cambiarias ya superó la barrera de los 1.000 millones de dólares, al ubicarse en $ 1.032,5 millones.

El promedio semanal de inyección de divisas se ubica en 86 millones de dólares. Esto supera el promedio del 2021, el cual se ubicó en 30 millones de dólares a la semana. De continuar esta política, en el primer semestre del año se superaría el monto total de dólares que el Gobierno de Maduro quemó el año pasado ($1.553 millones).

¿Cuánto dinero se inyectará?

De seguir y mantenerse este promedio de inyección de dólares en el sistema financiero nacional, se podría esperar que esta política requiera de 4.472 millones de dólares en 2022. ¿Es esto posible? Los especialistas lo dudan.

«Tenemos muchas dudas sobre la sostenibilidad de la política porque requiere de un gran volumen de dólares que vienen de las reservas internaciones y Venezuela tiene en este concepto 5.800 millones de dólares. Son las reservas más bajas en 30 años», apunta el economista y profesor del Iesa, José Manuel Puente.

Una jugada arriesgada

La jugada ha sido efectiva para contener el precio del dólar, pero no deja de ser arriesgada. El precio de las operaciones del cambio oficial han caído en 2022 y también viene presionando a la baja la cotización del paralelo.

A juicio del economista José Manuel Puente, la opción de anclar el tipo de cambio y no ajustar con base a la realidad y persiguiendo el tipo de equilibrio tarde o temprano va a llevar a la economía venezolana a dar un gran ajuste cambiario con un gran sobresalto en inflación y con efectos recesivos.

«Esto puede ser una ilusión de armonía que no es sostenible en el tiempo, porque el tipo de cambio de equilibrio de esta economía no es 4,7 ni 4,8 bolívares por dólar, es mucho mas que eso», señala Puente.

¿Y los ingresos petroleros?

Mantener una política que busca a toda costa apreciar el precio del bolívar frente al dólar requiere de dinero por parte del Gobierno, que en caso de no poder venir de las insuficientes reservas internacionales, entonces tendría que venir de ingresos petroleros o del fisco.

Según estimaciones del economista y presidente de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, «si los precios petroleros actuales se mantienen así como los niveles de producción de Venezuela, el gobierno de Maduro recibiría en 2022 un 70 % más en ingresos por concepto de venta de crudo que lo recibido en 2021».

Respecto al tema de ingresos vía impositiva, es clara la estrategia para poder recoger una parte de los dólares que circulan en el país a través del nuevo impuesto a las transacciones en divisas y criptomonedas.

Sin embargo, retener el precio real del tipo de cambio puede ser peligroso.

«Si el tipo de cambio se sigue apreciando y en algún momento no tenemos los dólares para seguir liquidando al aparato productivo, se va a dar un gran ajuste del tipo de cambio. Todo puede ser una ilusión de armonía con una bomba oculta que puede explotar en cualquier momento», advierte Puente.