Una audiencia en una corte de bancarrota de Delaware, Estados Unidos, no aprobó de inmediato la compra por parte de Limetree Bay, una filial de ArcLight Capital. La refinería, ubicada en las Islas Vírgenes, es 50% propiedad de Pdvsa.
La transacción fue objetada por otro interesado en las instalaciones, Buckeye Pipeline, y un grupo de acreedores. Limetree, que puso la oferta ganadora, propuso adquirir el terminal petrolero por $184 millones, reseñó el portal Argus Media.
La corte se reunirá nuevamente el 17 de diciembre.
Hovensa es propiedad conjunta de Pdvsa y la petrolera estadounidense Hess. La refinería mantiene una deuda con ambas empresas de $1.860 millones, compromiso por el cual se acogió a la ley de bancarrota.
La instalación dejó de operar en 2012 por las crecientes pérdidas. El gobierno de las Islas Vírgenes aboga por un comprador que asuma el compromiso de reactivarla para generar empleo en el país. Limetree, según el reporte, cumplía con estas expectativas.
El acuerdo de venta debe ser aprobado por el parlamento local. Este factor ha dificultado la venta de la instalación, que cerró en 2012 luego de tres años consecutivos arrojando pérdidas. De hecho, fue por este motivo que en diciembre de 2014 se rechazó el acuerdo operativo propuesto por un primer interesado, Atlantic Basin Refining (ABR). Se sospecha que un convenio con Limetree o Buckeye será mejor recibido por el gobierno local, pues se trata de firmas más experimentadas, explica Argus.
Ubicada en St Croix, la refinería tiene una capacidad para procesar alrededor de 500.000 barriles diarios y su terminal brinda fácil acceso a la costa atlántica de EEUU. Venezuela le suministraba crudo pesado.
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