Energía y Petróleo

La crisis eléctrica persiste pese a la suspensión del racionamiento

El aumento de la cota de Guri no representa el cese de la crisis eléctrica en el país. Expertos en el área aseguran que las lluvias no son garantía de que el embalse siga la senda positiva que ha tenido en las últimas semanas, pues la generación termoeléctrica sigue siendo insuficiente. 

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FOTO: ARCHIVO | EL INTERÉS

El consultor en materia eléctrica, José Aguilar, sostuvo que es difícil determinar si realmente hubo un ahorro durante los dos meses de racionamiento eléctrico «por la opacidad del gobierno».

«El mejor estimado de la restricción energética estaría cercano a los 35 a 40 GWh por día, lo que implicaría que el país ha retrocedido casi una década en materia energética. Es decir, Venezuela sobrevive con el consumo de energía y potencia de entre 2006 a 2007. Un retroceso de esta magnitud no encaja conceptualmente dentro de los parámetros de un ‘ahorro’, más bien es una destrucción económica a través de carencias eléctricas», subrayó.

El especialista recordó que el aumento de la cota de Guri no solo se debe a las lluvias de las últimas semanas sino también a que el gobierno apeló a la subproducción del mismo.

«Eso jamás había ocurrido en casi 48 años de operación comercial. Guri opera entre 25% a 30% de su capacidad de energía firme. En consecuencia, eso aminora la producción de las centrales de Caruachi y Macagua y por no haber suficiente energía térmica los racionamientos se mantienen», afirmó.

Aunque el gobierno suspendió el racionamiento eléctrico, denominado como Plan de Administración de Carga (PAC), el pasado 1 de julio, en Twitter han denunciado apagones en diferentes regiones del país como en Guárico, Maturín, Aragua, Anzoátegui, Miranda, Mérida y Caracas, desde el pasado martes 5 de julio y se tenía previsto que el PAC quedara sin efecto desde el 4 de julio.

Sobre la generación termoeléctrica, aseveró que sigue siendo deficiente, entre 145 a 160 GWh por día en el mejor de los casos.

«Es insuficiente para respaldar Guri y permitir un despacho hidrotérmico optimizado que permita la recuperación económica del país. La disponibilidad energética del parque de generación térmica oscila entre 33% a 37%, pues se requiere cerca de 52%», precisó.

Por ejemplo, en Planta Centro, ubicada en el estado Carabobo, de las 6 unidades con las que cuenta para un total de 2.600 megavatios, solo la 1 (200 Mw de 400), la 4 (195 Mw de 400) y la 6 (600 Mw) están en funcionamiento, es decir, que solo 38,27% de su capacidad instalada.

El experto apuntó que el aumento de la cota de Guri no representa que la crisis eléctrica se haya terminado, pues a su juicio no es suficiente. «La estrategia de subproducción energética de la represa no es sostenible, como tampoco es prudente aspirar llevar a un embalse a 271 metros sobre el nivel del mar cuando el llenado aumenta las posibilidades de que el mismo se desperdicie. Eso es un mal uso del recurso», dijo.

Para Aguilar, el problema no es nivel de Guri, es la falta de energía térmica suficiente en términos de disponibilidad y confiabilidad que permita un respaldo adecuado del embalse.

«Cuando no llovía lo suficiente, el embalse fue abusado sobre produciendo por encima del nivel de energía firme porque no había suficiente generación térmica. Ese abuso y no El Niño fue lo que puso en aprietos al embalse. Desde hace 2 meses ha comenzado a llover más y ahora se apela a la subprodución de la represa por la misma razón: la insuficiencia térmica, operando Guri a energía firme (110 GWh día), cuando éste soporta tres años de sequía»,

Indicó que Venezuela acaba de concluir 26 meses seguidos con una tendencia hidrológica en la cuenca del Caroní desfavorable (por debajo del promedio histórico) y acaba de entrar al mes 27. «Cualquiera que sea la suerte del río Caroní, el gobierno por tener los modelos predictivos ya sabe la respuesta para lo que resta de 2016, pero la nación por la falta de ética del gobierno se irá enterando en ‘cámara lenta'», manifestó.

La cota de Guri alcanzó este 7 de julio los 250,48 m.s.n.m., lo que equivale al 25% del volumen útil de la Casa de Máquinas II de Guri. «Cualquier racionamiento a partir de ahora es por maldad… Totalmente injustificado», expresó.

“Guri ha subido más de nueve metros desde su mínimo histórico, pero si Venezuela tuviera la demanda que correspondía a 2016, apenas habría subido 2 metros con el parque térmico que tenemos. La crisis sigue”, aseguró.

El ingeniero eléctrico Paulo De Oliveira, y quien asiste técnicamente a la comisión mixta de la Asamblea Nacional que investiga la crisis eléctrica del país, sostuvo que a pesar del aumento de la cota de Guri el gobierno debe implementar un plan de contingencia pues el comportamiento del fenómeno La Niña, que se prevé llegue a final de 2016, puede no tener las precipitaciones esperadas.

“No sabemos cómo se comportará el embalse, no sabemos si las lluvias que vienen están entre el promedio o por debajo de él. Hay un aviso del fenómeno La Niña a final de año pero eso no garantiza que sea lluviosa porque en el pasado hemos tenido fenómenos de La Niña que son secos, y por lo tanto la prudencia indica que deberíamos tener un plan de contingencia», detalló.

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