El Departamento de Justicia de Estados Unidos ordenó la incautación de cuatro buques cargados con gasolina iraní que se dirigen hacia Venezuela.
Un tribunal del distrito de Columbia señaló, mediante un comunicado, que la carga de los buques Bella, Bering, Pandi y Luna «están sujetos a decomiso según el estatuto de decomiso de terrorismo».
Los cuatro buques, con dirección a Venezuela, traían en conjunto una carga de 1.163.208 barriles de gasolina. Esto equivale a aproximadamente un mes de consumo de combustible para Venezuela, en medio de la cuarentena por la pandemia del nuevo coronavirus.
Según el comunicado, los buques obtuvieron gasolina iraní mediante transferencias de barco a barco. El departamento de Justicia de EEUU señala que con estos envíos, aumenta la influencia del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC), una organización extranjera catalogada como terrorista por parte del gobierno de Estados Unidos.
«Las ganancias de las ventas de petróleo respaldan toda la gama de actividades nefastas del IRGC, incluida la proliferación de armas de destrucción masiva y sus medios de entrega, apoyo al terrorismo y una variedad de abusos contra los derechos humanos, en el país y en el extranjero», señala el comunicado.
EEUU presiona por tema de gasolina
Esta no es la primera vez que el Gobierno de Trump intenta bloquear el paso de combustible a Venezuela, tras la llegada hace más de un mes de cinco buques cargados con gasolina iraní.
Este miércoles, un tribunal federal en Houston subastó 100.000 barriles de gasolina que Wilmer Ruperti, un magnate venezolano cercano al Gobierno de Maduro, planeó enviar al país sudamericano.
Estados Unidos impuso más sanciones a la estatal venezolana Petróleos de Venezuela en enero de 2019. Todo esto en un esfuerzo por propiciar la salida de Nicolás Maduro. Además ha impuesto medidas a navieras que transporten crudo venezolano y ha advertido de sanciones contra otras empresas que hacen negocios con Venezuela.