Esta extensión de la licencia por parte de la OFAC ocurre en un momento en el que las industrias petroleras están atentas a posibles flexibilizaciones de las sanciones
Hace un año, el departamento del Tesoro de los Estados Unidos, a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), autorizó a las empresas estadounidenses la exportación de gas licuado de petróleo a Venezuela, esto en un momento en el que la escasez de gas doméstico llevó a los hogares venezolanos a utilizar leña y utensilios eléctricos para poder cocinar. Ahora, EEUU extiende por un año más esta autorización.
La nueva licencia emitida este 7 de julio fue renovada por un año más, específicamente hasta el 12 de julio de 2023, y contempla licencias para la exportación y reexportación de gas licuado utilizado principalmente para cocinar y generar energía eléctrica.
Este permiso aplica para las empresas estadounidenses que pretenden vender gas licuado a Pdvsa o a la administración de Nicolás Maduro. Sin embargo, existen algunas limitantes: no se puede pagar con petróleo venezolano.
Esta extensión de la licencia por parte de la OFAC ocurre en un momento en el que las industrias petroleras están atentas a posibles flexibilizaciones de las sanciones impuestas bajo la administración de Trump, pero que se espera se suavicen con la administración de Biden.
Repsol espera que la producción de sus empresas conjuntas venezolanas con Pdvsa se duplique después de un reciente acuerdo para ampliar las áreas asignadas a los proyectos
Con la ampliación en los últimos años de los negocios de Pdvsa con empresas de Irán y Rusia, no parece viable que Estados Unidos quiera volver a dejar de lado los negocios petroleros con Venezuela en un contexto geopolítico complejo en el que los escenarios bélicos están a la orden del día
