Augusto Nitti asume el reto de interpretar a una mujer transexual

A lo largo de 28 años de trayectoria artística, Augusto Nitti (Caracas, 1981) se ha metido en la piel de galanes, amigos despistados, solteros empedernidos y esposos abnegados. Hasta ha dado vida al genio de una lámpara y a un prócer de la Independencia. Pero hace poco más de un año se le presentó una oportunidad distinta: la de interpretar a Anzuelo Guerra, una artista drag, pieza clave en la película “La chica del alquiler”, original de Fernando Martínez, dirigida por Carlos Caridad Montero, que actualmente se proyecta en las salas de cine del país.

Al asumir el reto, el actor venezolano no se amilanó ante el personaje, aunque le supuso un arduo trabajo de investigación y transformación tanto física como psicológica.

“Con mucha responsabilidad asumí el reto porque, a través de la comedia, se puede caer en una forma de burla y no quería nada de eso. Quería que Anzuelo fuese ser humano, una mujer con su psiquis y con su cuerpo. La psicología de ella la construí con la ayuda del guion y las entrevistas que tuve con mujeres transexuales”, explica Nitti.

Para interpretar a esta colorida mujer, el actor relata que diseccionó el guion de la película para saber quién era Anzuelo, de dónde venía, cómo eran sus sentimientos y qué tipos de valores tiene como ser humano.

“Luego, me asesoré con varias drag queen y mujeres transexuales. Al principio, había algo de reserva, pero luego hermosamente me contaron sus vidas, lo que han sufrido, sus alegrías y, algo muy importante, como usan el humor en su día a día porque la película es una comedia y tenía que tomar todas esas experiencias y sublimarlas, a través de la risa y la verdad, en Anzuelo. Ellas me contaron anécdotas, vivencias, anhelos y desamores; y entonces, amalgamé cada detalle de estas experiencias personales a Anzuelo”, detalla.

Lo que aprendió Augusto Nitti

El actor hace un balance de lo que le enseñó su personaje y lo que, a su vez, le gustaría transmitir a los espectadores, precisamente en el Mes del Orgullo Gay.

“Anzuelo me enseñó a conocer más y a no juzgar. Somos una red interdependiente de energía. Juzgamos lo que no conocemos, por miedo, por ignorancia. Aspiro que ella toque los corazones de los espectadores y que abramos nuestras mentes desde el respeto a este hermoso grupo de seres humanos que son muy maltratadas y vejadas en nuestra sociedad”, sostiene.

Y agregó: “También tengo el anhelo de que las Anzuelo que miren el filme tengan un mejor trato por parte de nuestra sociedad. En mi prueba de vestuario fui perseguido y recibí insultos. Fue muy desagradable, pude sentir el acoso y la falta de respeto que ellas sufren”.

Próximo a celebrarse el evento que ayudó a impulsar el movimiento moderno por la lucha de los derechos de la comunidad LGBT+, Nitti piensa que existen muchos prejuicios en torno a este conglomerado.

“Y, la verdad, es que se hace mucho daño. Incluso, al visitar lugares nocturnos donde hacen shows, trans y drags, mi sorpresa fue encontrar personas que critican a la comunidad, pero que en las noches, tienen una doble vida. Debemos acelerar las leyes que protejan a la comunidad y crear herramientas para que nuestra sociedad sea libre de prejuicios”, sentenció.

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