El jefe de la diplomacia de Estado de Estados Unidos, John Kerry, afirmó hoy que espera ser el primer secretario de Estado de su país en visitar la isla de Cuba en 60 años, y adelantó que en enero próximo enviará a La Habana a su secretaria adjunta para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, por orden del presidente Barack Obama.
Jacobson viajará a Cuba «para discutir el avance hacia el restablecimiento de las relaciones diplomáticas» y liderar la delegación de Washington a la siguiente ronda de negociaciones sobre Migración entre Estados Unidos y Cuba, dijo Kerry.
Los servicios de información y diplomáticos de Estados Unidos, difundieron este 17 de diciembre las declaraciones oficiales de Kerry acerca de la histórica distensión de las relaciones entre su país y el gobierno comunista de la isla caribeña.
A continuación, la transcripción íntegra:
«Yo era un joven de diecisiete años viendo televisión en blanco y negro cuando escuché por primera vez a un presidente estadounidense hablar de Cuba como una «isla prisionera.»
Durante las últimas cinco décadas y media, nuestra política hacia Cuba se ha mantenido virtualmente congelada, logrando muy poco para promover una Cuba más próspera, democrática y estable. No sólo no se ha logrado avanzar en los objetivos de los Estados Unidos, sino que se ha aislado a los Estados Unidos en lugar de aislar a Cuba.
Desde 2009, el Presidente Obama ha dado pasos vanguardistas para cambiar nuestra relación y mejorar la vida del pueblo cubano a través de la flexibilización de las restricciones de las remesas y los viajes familiares.
Con esta nueva apertura, el Presidente ha comprometido a los Estados Unidos a trazar un camino aún más ambicioso.
Desde hace más de veinte años, he visto de primera mano cómo tres presidentes – un republicano y dos demócratas – han llevado a cabo un esfuerzo similar para cambiar la relación de Estados Unidos con Vietnam. No fue fácil. No se ha logrado aún. Pero tenía que empezar en alguna parte y ha funcionado.
Como lo hicimos con Vietnam, cambiar nuestra relación con Cuba requerirá una inversión de tiempo, energía y recursos. La etapa que inicia hoy también refleja nuestra firme convicción de que el riesgo y el costo de tratar de cambiar el rumbo es mucho menor que el riesgo y el costo de mantenerse estancados en un cemento ideológico de nuestra propia creación.
Este nuevo curso no estará exento de desafíos, pero no está basado en un acto de fe, sino en la convicción de que es la mejor manera de ayudar a llevar libertad y oportunidades al pueblo cubano, y promover los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos en las Américas, incluyendo una mayor estabilidad regional y mejores oportunidades económicas para las empresas estadounidenses.
En enero, como parte de las directrices del Presidente Obama para discutir el avance hacia el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, mi secretaria adjunta para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, viajará a Cuba para liderar la delegación de los Estados Unidos a la siguiente ronda de negociaciones sobre Migración entre Estados Unidos y Cuba.
Espero poder ser el primer Secretario de Estado que visite Cuba luego de 60 años. A petición del Presidente Obama, también he solicitado a mi equipo iniciar la revisión de la designación de Cuba como un estado patrocinador del terrorismo.
Mirando hacia el futuro, nuestro enfoque crítico seguirá siendo parte de nuestra interacción para mejorar el respeto del gobierno cubano por los derechos humanos y la promoción de reformas democráticas en Cuba. La promoción de la libertad de expresión, el emprendimiento y una sociedad civil activa fortalecerá la sociedad cubana y ayudará a reintegrar a Cuba dentro de la comunidad internacional».
Las imágenes muestran a un hombre acostado boca arriba en la acera frente al Tribunal Penal de Manhattan mientras la parte inferior de su cuerpo está en llamas. Luego, otro hombre lo rocía con un extintor que parece apagar el fuego
"Venezuela rechaza una vez más la pretensión del gobierno de los Estados Unidos de América de monitorear, tutelar, controlar y manipular la industria petrolera venezolana a través de su política ilegal de imposición de medidas coercitivas y licencias", dijo el canciller Yván Gil al leer un comunicado
EEUU dijo que detuvo alrededor de 70 drones y que la Armada derribó entre cuatro y seis proyectiles balísticos, pero aseguró que no busca involucrarse en una posible escalada del conflicto: "No queremos que esto se intensifique"
