El conflicto en Sudán del Sur ha obligado a más de dos millones de personas a abandonar sus hogares y a vagar en su país o a huir a las naciones vecinas, informó hoy el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).El ACNUR ha contabilizado 550.000 personas que han cruzado la frontera y se refugian en otros países de la región, y otro millón y medio que son desplazados en su propio país.
La última ola de desplazamientos ha ocurrido en los últimos dos meses, provocados principalmente por los combates en los estados de Alto Nilo y Unity, que han obligado a huir a 100.000 personas.
Estos enfrentamientos también han bloqueado ayuda humanitaria para asistir a 650.000 personas.
Desde principios de año, unos 60.000 sursudaneses han huido del país y se refugian en Sudán (30.000), Etiopía (15.000) y Uganda (15.000).
El ACNUR denunció que 3,8 millones de los 11 millones de sursudaneses no tiene comida suficiente para alimentarse.
Dada la inseguridad reinante y la precariedad alimentaria, el ACNUR está preparándose anticipadamente ante el probable aumento del número de refugiados.
A pesar de esta situación, el llamamiento humanitario para los refugiados sursudaneses sólo está dotado con el 10 % de los recursos que necesita.
En Sudán del Sur se registra un conflicto armado desde diciembre de 2013 entre las fuerzas leales al actual presidente Salva Kiir y los rebeldes fieles a Mashar depuesto un año antes, que ya ha causado miles de muertos
