Los gobiernos de Argentina, Brasil y Paraguay manifestaron su abierto rechazo a las intenciones del gobierno de Nicolás Maduro de hacerse con la presidencia temporal del Mercosur y ratificaron su posición de que el país caribeño no reúne las condiciones políticas ni económicas para tal fin, ni ha cumplido las condiciones establecidas hace cuatro años para pertenecer al bloque comercial.
Brasil también se ha pronunciado después que lo hicieran paraguay y Argentina, mientras Uruguay mira para otro lado.
Según el portal de noticias Brasil 247, el canciller de ese país, José Serra, envió una carta a sus homólogos de los demás socios del Mercosur en la que indicó que la presidencia del bloque aduanero «está vacante».
La misiva, divulgada por el diario O Estado de S.Paulo, indica que Brasil desconoce el anuncio de Venezuela de que asumió la presidencia rotativa del Mercosur, que Uruguay dejó el sábado.
«El Gobierno brasileño entiende que la Presidencia Pro Tempore del Mercosur está vacante, una vez que no hubo una decisión consensual al respecto de su ejercicio», indica la carta enviada por Serra a los cancilleres de Argentina, Paraguay, Uruguay y Venezuela. Serra insitió en que Venezuela no ha cumplido su compromiso de adoptar las normas del Mercosur en el plazo de cuatro años, que vence este mes y que le fue concedido en el 2012 cuando aceptó su adhesión al bloque como socio pleno.
Por su parte, la agencia de noticias EFE reportó que el gobierno de Argentina declaró que «ningún país» puede asumir la presidencia pro témpore (temporal) del Mercosur si no se hace con un «traspaso» en una reunión oficial y propuso un encuentro de coordinadores «para solucionar» la situación generada luego de que Venezuela asumiera esa función de manera unilateral por el orden alfabético, señalaron fuentes oficiales.
«Argentina considera que ningún país puede asumir la presidencia pro témpore sin traspaso y propone una reunión de coordinadores para solucionar este problema», expresaron a EFE desde el Ministerio de Relaciones Exteriores.
El pasado viernes, Uruguay comunicó al resto de países del Mercosur -Argentina, Brasil, Paraguay y Venezuela- que daba por concluida su presidencia semestral del bloque, pero sin nombrar el traspaso al país caribeño, al que debido al orden rotativo alfabético que estipulan los estatutos del bloque regional le corresponde asumir el liderazgo.
Fue así que posteriormente Venezuela comunicó en una misiva que asume la presidencia, una asunción calificada como «de facto» por Paraguay, que junto a Brasil se mostró en contra del traspaso a Venezuela al considerar que ese país no puede ejercer la presidencia del Mercosur debido a que no tiene las condiciones políticas y económicas para desempeñar el cargo.
«Estamos en una situación muy grave», remarcó hoy en referencia al Mercosur el ministro de Relaciones Exteriores uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, quien aclaró que su país dejó la presidencia «tal cual establece clara y nítidamente el Tratado de Asunción», que dice que los mandatos «duran seis meses y se rota por orden alfabético de los países».
Por su parte, el canciller paraguayo, Eladio Loizaga, quien no reconoció la decisión «unilateral» de Venezuela de tomar el timón, consideró el viernes que el traspaso se debe realizar como se vienen haciendo desde hace 25 años, que es a través de una reunión de cancilleres y jefes de Estado, y por medio de consenso.
Uruguay había anunciado para el pasado sábado una reunión del Mercosur en Montevideo sobre el traspaso de la presidencia a Venezuela, pero finalmente no se realizó, ya que Paraguay y Brasil decidieron no asistir al encuentro.
Loizaga, reiteró que su Gobierno no reconoce a Venezuela al frente de la presidencia temporal de Mercosur y añadió que por tanto no dará validez a cualquier documento o convocatoria realizada por el país caribeño bajo el marco de esa «autoproclamación».
«Bajo ningún punto de vista. Además que tampoco vamos a participar de ninguna convocatoria que se haga (por parte de Venezuela) porque no existe una autoproclamación de la presidencia (del bloque)», dijo Loizaga a los periodistas.
«Como canciller, vuelvo a repetir que para nosotros esta presidencia (de Venezuela) es inexistente (..) La posición del Gobierno es clara, no acepta esta autoproclamación por parte de Venezuela en el ejercicio de la presidencia pro témpore», señaló Loizaga en una comparecencia en la sede presidencial.
Venezuela informó el viernes al resto de países miembros del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) que asumía «con beneplácito el ejercicio de la Presidencia Pro Témpore del Mercosur, con fundamento en el artículo 12 del tratado de Asunción y en correspondencia con el artículo 5 del Protocolo Ouro Preto».
«Si bien el Protocolo de Ouro Preto señala el método del ejercicio de la presidencia respetando la rotación cada seis meses por el orden alfabético, eso se perfecciona en la reunión de los cancilleres con la presencia de los jefes de Estado, lo que se conoce como Cumbre del Mercosur».
Además, Loizaga subrayó que Venezuela no se ha adherido todavía a normativas internas del Mercosur como el protocolo en materia de derechos humanos redactado en la pasada Cumbre de jefes de Estado del bloque, celebrada el pasado diciembre en Asunción.
«El protocolo señala como una condición, yo diría que sine qua non, el respeto irrestricto de los derechos humanos, la libertad de prensa, la libertad de opinión, la libertad de movimientos, la libertad de asociación», explicó el canciller.
Indicó que ese protocolo cuenta con la adhesión de Paraguay, Argentina, Brasil y Uruguay, pero que «Venezuela hasta el momento no lo ha hecho».
El canciller agregó que esta semana se reunirán con representantes de Argentina y Brasil para «avanzar en esta situación» y encontrar «el camino que nos conduzca a la normalización de la presidencia».
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