Estas precipitaciones, las más importantes en 30 años según el jefe de la junta en el poder, afectan a regiones muy visitadas por los extranjeros en esta temporada alta para el turismo.
Se han registrado numerosas anulaciones en las islas de Kho Samui y Kho Phangan, que generalmente gozan de un tiempo seco y cálido en esta época del año.
«Dos puentes se han hundido sobre la autopista n°4. Tras el desplome, hemos tenido que cortar la circulación» a unas cuatro horas de coche al sur de Bangkok, explicó el portavoz de la red de autopistas tailandesa.
«Los cimientos de los puentes han sido destruidos por las inundaciones», agregó.
El tráfico ferroviario también está cortado en esta región donde en algunos lugares el agua arrancó raíles, tras más de una semana de lluvias torrenciales.
En total, 12 provincias del sur de Tailandia están afectadas, hay 1,1 millón de damnificados y 360.000 casas inundadas.
El gobierno movilizó soldados para repartir comida entre los habitantes y evacuar algunas zonas en las que este martes seguía lloviendo.
El sur de Tailandia es muy dependiente del turismo y de la agricultura, sobre todo la producción de caucho, fruta y aceite de palma.
Son las segundas inundaciones que afectan al sur turístico del país en pocas semanas. En las primeras, registradas en diciembre, murieron unas 35 personas.