La renuncia de Evo Morales parece abrirle nuevamente las puertas a Bolivia de cara al resto del mundo. La presidenta interina Jeanine Añez anunció el nombramiento de un nuevo embajador ante Estados Unidos, aunque aún falta que el Senado - dominado por partidarios de Evo Morales - apruebe su nombramiento
El gobierno interino de Bolivia designó a un nuevo embajador en Estados Unidos, 11 años después de que ambos países expulsaran mutuamente a sus diplomáticos.
Después de una fuerte crisis entre La Paz y Washington en 2008, la cancillería informó este 25 de noviembre hay un nuevo embajador.
«#Hoy Canciller @KarenLongaric posesionó al nuevo Embajador Extraordinario con Representación Plenipotenciaria ante el Gobierno de Estados Unidos de América, Walter Oscar Serrate Cuellar», escribió la cancillería en su cuenta oficial en Twitter.
El nombramiento aún debe ser aprobado por el Senado, controlado por el partido de Evo Morales, quien en 2008 expulsó al embajador estadounidense Philip Goldberg.
Hace 11 años, Morales declaró persona no grata a Goldberg y lo acusó de apoyar protestas opositoras en cinco de los nueve departamentos del país.
Washington, en reciprocidad, también expulsó al embajador boliviano Gustavo Guzmán.
Desde entonces a la fecha las embajadas han estado dirigidas en ambos países por encargados de negocios.
Morales, ahora asilado en México tras su dimisión el 10 de este mes, dijo en septiembre de 2008 para justificar la expulsión que el embajador Goldberg promovía la «división» del país, al sostener reuniones con gobernadores opositores que -según La Paz- apoyaban supuestos planes para separar Bolivia.
Aquella decisión del ahora exgobernante boliviano motivó que su aliado político, Hugo Chávez (1999-2013), también expulsara al embajador de Estados Unidos en Venezuela, Patrick Duddy.
#Hoy | Canciller @KarenLongaric posesiónó al nuevo Embajador Extraordinario con Representación Plenipotenciario ante el Gobierno de Estados Unidos de America, Walter Oscar Serrate Cuellar, quien fue Embajador y Representante Permanente de Bolivia ante la ONU. pic.twitter.com/ksHXieXLIm
— Cancillería Bolivia (@MRE_Bolivia) November 26, 2019
A dos semanas de la salida de Evo Morales del poder, Bolivia y el mundo aún debate lo ocurrido, mientras aires de cambio parecen instaurarse en una nación que caminaba firme en la izquierda latinoamericana
Tras seis horas de debates, el pleno de la Cámara de Diputados sancionó por unanimidad la ley de urgencia para agilizar la convocatoria de nuevas elecciones, y la remitió al Gobierno transitorio para su promulgación.
El régimen excepcional y transitorio prevé la renovación del Tribunal Supremo Electoral (TSE), la inscripción de votantes y la participación de todas las fuerzas políticas, aunque impide que Morales y su exvicepresidente sean candidatos.
