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Republicano DeSantis, posible precandidato presidencial, reelegido gobernador de Florida

DeSantis acaparó los focos por su oposición a las medidas estrictas para frenar la propagación de covid-19. También promulgó una prohibición del aborto de 15 semanas a principios de este año, uniéndose a un impulso nacional de los conservadores para restringir los derechos reproductivos

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Ron DeSantis, potencial rival de Donald Trump por la nominación presidencial republicana de 2024, fue reelegido gobernador de Florida este martes, según los medios estadounidenses.

Estrella emergente de la derecha dura, DeSantis, de 44 años, se impuso como era de esperar en este estado conservador al exgobernador Charlie Crist, un exrepublicano que había cambiado de partido, según las cadenas ABC y CNN.

Los resultados no oficiales otorgan a DeSantis casi 20 puntos más que a Crist, un margen de más de 1,4 millones de votos, aunque se siguen contando las papeletas.

«Gracias al abrumador apoyo de la gente de Florida, no solo ganamos las elecciones, sino que hemos reescrito el mapa político», dijo DeSantis en Tampa el martes por la noche entre los aplausos de sus partidarios.

El gobernador calificó su victoria de «aplastante» y criticó la agenda de los políticos liberales.

«Hemos abrazado la libertad. Hemos mantenido la ley en orden, hemos protegido los derechos de los padres. Hemos respetado a nuestros contribuyentes y rechazamos la ideología del woke», como se conoce a militantes de izquierda, dijo DeSantis.

«Luchamos contra el woke en la legislatura, luchamos contra el woke en las escuelas, luchamos contra el woke en las corporaciones. Nunca, nunca nos rendiremos ante la mafia del woke. Florida es donde el woke va a morir».

Ron DeSantis desató la polémica recientemente al reivindicar el envío de aviones con inmigrantes a Martha’s Vineyard, una isla del noreste deEstados Unidospara gente adinerada.

Se sumaba así a un movimiento lanzado por los gobernadores republicanos de Texas y Arizona para enviar inmigrantes a las ciudades gobernadas por demócratas del norte y este del país, un gesto muy político destinado a seducir a sus votantes.

Muy comprometido con los temas educativos, el republicano también firmó este año una ley que prohíbe la enseñanza de materias relacionadas con la orientación sexual o la identidad de género en los centros de enseñanza primaria.

El texto, muy polémico, fue apodado por sus opositores «Don’t say gay» («No digas gay»).

DeSantis acaparó los focos por su oposición a las medidas estrictas para frenar la propagación de covid-19. También promulgó una prohibición del aborto de 15 semanas a principios de este año, uniéndose a un impulso nacional de los conservadores para restringir los derechos reproductivos.

Aunque DeSantis no ha declarado su candidatura para la nominación presidencial republicana, claramente se lo plantea y se niega a comprometerse a cumplir su segundo mandato completo como gobernador.

Trump es consciente del potencial de este posible rival y declaró a Fox News la víspera de la votación que si DeSantis se presenta «podría lastimarse mucho. Realmente creo que podría lastimarse gravemente».

«Creo que estaría cometiendo un error, creo que a la base no le gustaría, no creo que sea bueno para el partido», dijo Trump.

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