EEUU pone fecha a la designación del Cártel de los Soles como amenaza a la nación: "Organización Terrorista Extranjera"

Un fin de semana de rumores termina con una noticia que a su vez fija un plazo: «El Departamento de Estado tiene la intención de designar al Cártel de los Soles como Organización Terrorista Extranjera (OTE), a partir del 24 de noviembre de 2025», informó Marco Rubio hoy domingo en un breve comunicado de prensa.

¿Y después del 24 de noviembre qué?, es la nueva pregunta que nos haremos a partir de esta noche sabiendo, además, que finalmente hoy también llegó al Caribe el famoso portaaviones Gerald R. Ford.

El comunicado del secretario de Estado no responde a la pregunta, pero reitera las consideraciones de la administración Trump para esta medida: «Con sede en Venezuela, el Cártel de los Soles está dirigido por Nicolás Maduro y otros altos cargos del régimen ilegítimo de Maduro, quienes han corrompido las fuerzas armadas, los servicios de inteligencia, el poder legislativo y el poder judicial de Venezuela. Ni Maduro ni sus allegados representan al gobierno legítimo de Venezuela. El Cártel de los Soles, junto con otras OTE designadas, como el Tren de Aragua y el Cártel de Sinaloa, es responsable de la violencia terrorista en todo el hemisferio, así como del narcotráfico hacia Estados Unidos y Europa».

Las últimas líneas del documento firmado por Marco Rubio dejan la advertencia en el aire: «Estados Unidos seguirá utilizando todos los medios a su alcance para proteger sus intereses de seguridad nacional y negar la financiación y los recursos a los narcoterroristas».

En febrero de este año, el Tren de Aragua y otros grupos criminales de México y El Salvador fueron designados por el departamento de Estado como «organizaciones terroristas extranjeras (FTO) y terroristas globales especialmente designados (SDGT)».

En julio de este año, el Cártel de los Soles fue designado por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro como una organización «terrorista global especialmente designada».

Las implicaciones de esa medida de julio son bloqueos de bienes en EEUU tanto de propiedad directa como en sociedad, prohibición de transacciones con personas estadounidenses o residentes y todo esto bajo pena de cárcel para quien viole la disposiciones.

Esta nueva designación como OTE va más allá de afectar bienes y negocios: a partir del 24 de noviembre toda la estructura que Estados Unidos considera como Cártel de los Soles será considerada como una amenaza para la nación. Aunque no se puede asumir como una autorización para un ataque convencional a otro país, en el papel, la designación haría posible acciones puntuales contra líderes o células de la OTE, facilitaría la cooperación con aliados y sin duda es un escalón más -en este caso- para la narrativa impulsada por la administración Trump en su presión contra Nicolás Maduro.

En la práctica, también establece bloqueos de activos en territorio de EEUU, sanciones legales para quienes sostengan relaciones comerciales o faciliten operaciones de la organización terrorista y restricciones migratorias y en materia de visados.

¿Por qué esperar hasta el 24 de noviembre para oficializar la designación? De momento, Rubio no lo explicó. Pero es lícito suponer que se anuncia el mecanismo de presión para forzar a una negociación que incluso logre evitar el paso sobre el que tanto se ha especulado durante los últimos días en medios estadounidenses con base siempre en fuentes anónimas y supuestos funcionarios del gobierno: las acciones directas en Venezuela.

Una declaración hecha esta misma noche por el presidente Trump da pie a la interpretación de que, pese a que todos los puentes parecían rotos, algo queda en pie: consultado en el aeropuerto internacional de Palm Beach por Fox News sobre la situación con Maduro, el mandatario estadounidense dijo: «Puede que tengamos algunas conversaciones con Maduro, y ya veremos cómo resultan, pero ellos quieren hablar».

¿Será o no será? Hay que esperar. Mientras tanto, comenzó otra nueva hora de los brujos, el tiempo de los «bien dateaos», de los youtubers y los incansables analistas.