Los trasnochos provocan ansiedad y aumento de peso

Los trasnochos frecuentes repercuten negativamente en las personas, incluso más allá de lo que se cree. Además de cansancio, afecta la salud emocional y puede ser causa de sobrepeso.

Trasnocharse una noche o dos no importa, pero habituarse a dormir tarde, incluso estando en casa, sí puede ser un problema. El sistema inmune se deprime y aumenta la secreción de hormonas relacionadas con la ansiedad y el hambre.

“Dormir de más no es bueno, pero tampoco lo es dormir poco. Cuando no se descansa entre 6 y 8 horas diarias, que es lo normal, aumenta el riesgo de enfermedades, afecta el humor y las emociones, disminuye el tejido cerebral y se incrementa la tendencia a ver pacientes diabéticos e hipertensos», explica el médico cirujano Wartan Keklikian de la Unidad Bariátrica y Metabólica (UBAM) de la Clínica La Floresta, en Caracas.

Keklikian indica que los trasnochos elevan la predisposición a padecer de diabetes y aumenta el riesgo a la obesidad. Se alteran los mecanismos de regulación de las hormonas como la grelina y la leptina, que son las que controlan el apetito y esas “ganas” de comer de más.

Explica el especialista que quienes se trasnochan suelen comer en la noche. Esta situación, unida a las alteraciones hormonales, afectan la ansiedad y el hambre y hace que consuman más comida de la que necesitan. ¿Consecuencia? El aumento de peso.

No importa la razón de los trasnochos. Puede ser por ver películas, por divertirse o por teletrabajo. El cuerpo igual sufre.

La recomendación es dormir de 6 a 8 horas, aunque el especialista explica que hay quienes necesitan descansar un poco menos de 6 horas, pero es un grupo más reducido.

Los trasnochos diarios

Keklikian comenta que, aunque no hay una medida para decir cuántos trasnochos “son malos” o con qué frecuencia “es malo” , cada vez o cada día que se ha dejado de dormir el tiempo suficiente, se va “sumando” de forma acumulativa, hasta ver los efectos.

“Es como salirse de la dieta. Si es hoy pero mañana retomo y hago ejercicio, entonces no pasa nada. Pero si hoy me salgo, mañana y pasado mañana también, se ven los problemas”, asegura.

En lo que se refiere a acostarse tarde como un hábito que se ha adoptado durante cierto tiempo, Keklikian asegura que no hay “borrón y cuenta nueva”, aunque luego se retome la costumbre de cumplir el horario de sueño.

“Los excesos quedan y al final el cuerpo pagará. Es como alguien que alguna vez fumó y deja de hacerlo. Ya no será igual que una persona que nunca ha fumado en su vida, por ejemplo”.

El especialista agrega que los efectos de los trasnochos en la salud dependen también de la genética de cada persona y de sus hábitos de vida.