Postemporada de Grandes Ligas: sorpresas y decepciones

Al inicio de toda temporada, el material de cada conjunto nos hace suponer desempeños y eventuales accesos a instancias avanzadas.

A medida que se desarrolla el torneo, muchas costuras comienzan a evidenciarse y otras actuaciones inesperadas nos llenan de alegría, porque el fanático del deporte es así: termina alegrándose por el bien de los conjuntos que, mas en la práctica que en la teoría, no disponen de recursos para engranar un “trabuco” ganador.

Comencemos…

En la Liga Americana, concretamente en la división este, ha existido una eterna lucha por salir airoso entre tanto equipo bien conformado. Los Yankees de Nueva York emergen como la potencia millonaria, capaz de superar cualquier obstáculo a fuerza de dinero, al margen de la calidad de su plantilla repleta de nombres extraordinarios. Sin embargo, esa superioridad ha pasado históricamente por fajarse con el nivel de sus compañeros. Ergo, no ha sido un paseo por las nubes el mantener etapas ganadoras si debes mirar constantemente hacia el jardín de Medias Rojas de Boston; Azulejos de Toronto y Ray de Tampa Bay. Organizaciones estructuradas y remozadas con criterio ganador. De hecho, esa división aporto tres de sus integrantes a la fiesta de la postemporada (Yankees, Rays y Azulejos).

No obstante, es menester resaltar la gran campaña que atravesó Orioles de Baltimore. Es la alegría que mencionábamos al comienzo de este trabajo. Un plantel liderado por jóvenes figuras, da para especular mucho y positivamente en lo que pudiera ser el futuro de los oropéndolas. Pareciera estar cerca la hora   de hacer el “gran movimiento” que los obligue a meterse las manos en el bolsillo para compactar un equipo que ya en 2022 dio la gran campanada. Es, en la justa que entra en postemporada, una de las sorpresas mas refrescantes y esperanzadoras. Aunque no avanzó, si terminó muy cerca del puesto de comodín (a 3 juegos de Tampa Bay).

El centro del nuevo circuito tuvo otra actuación contundente y hasta cierto punto, inesperada. No muchos se atrevieron a afirmar que Guardianes de Cleveland terminarían siendo campeones y con 11 juegos de ventaja sobre su más cercano seguidor.

Los análisis daban enorme chance a Medias Blancas de Chicago e incluso a Mellizos de Minnesota para alzarse con los honores en ese apartado de la Liga Americana. Solo que parecieron no tomar en cuenta la veteranía de Terry Francona y el grupo de talentos que vistieron la camiseta de Cleveland durante la ronda regular de 2022. Para Medias Blancas, luego de inversiones significativas, terminar el torneo con balance de 81 triunfos y 81 derrotas, más que un récord balanceado, es un punto de partida para profundos movimientos de cara al 2023. El retiro de Tony La Russa y la oportunidad que recibió el criollo, Miguel Cairo, al mando del club en el terreno de juego, será elemento interesante para el análisis en la oficina de los patiblancos.

El oeste sólo mostró algo “raro” al inicio de la contienda. Unos inspirados Angelinos de Los Ángeles figuraban al tope de la tabla clasificatoria, pero hasta ellos mismos estaban convencidos de que ese lugar no les correspondería por mucho tiempo. Ese puesto fue para los muchachos de Dusty Baker… una vez más.

Astros de Houston, con su batería encabezada por José Altuve y Yordan Álvarez, entre tantos otros talentos, se encargaron de ratificar lo que sobre ellos se comentaba en cada análisis previo a la zafra de 2022: no había manera de que no fuesen campeones de la división. Y lo refrendaron con un balance de 106 victorias y 56 reveses, el mejor registro de la Liga Americana.

De esa división, y aprovechando las bondades de la expansión de invitados a la postemporada, se coló a la segunda fase Marineros de Seattle. Terminó a 16 juegos de Houston en la pelea divisional, pero le alcanzó para estar incluso sobre Tampa Bay en el área de los comodines.

Ratificaron favoritismo: Yankees, Astros

Sorprendieron gratamente: Cleveland

Decepcionaron: Boston, Chicago, Minnesota

Equipo a seguir: Baltimore

Y en la Liga Nacional…

La división este fue noticia hasta el final. Una vez más se impusieron los Bravos de Atlanta en lucha directa con Mets de Nueva York.

Los metropolitanos, a mediados de temporada, lucían encaminados, y aparentemente con facilidad, hacia el título divisional. No obstante, el fantasma de las lesiones los azotó de nuevo y comenzaron a ceder peligrosamente el terreno ganado ante unos Bravos de Atlanta empeñados en reeditar su actuación de 2021.

Al final, “el corazón del campeón” se impuso y, a pesar de haber finalizado con idéntico récord (101-61), la serie particular que estuvo a favor de Bravos, actuó como factor diferenciador que a la postre permitió el pase directo de Atlanta a la serie divisional y envió a Mets al trabajo forzado en la serie de comodines en la que tendrán que medirse a Padres de San Diego y de avanzar, toparse con Dodgers de Loas Ángeles… tal era la diferencia entre ser campeón de la división o uno de los comodines.

En el centro de la Liga Nacional, no parecía existir enemigo claro para Cardenales de San Luis. Se habló por momentos de la posibilidad de Cerveceros de Milwaukee de plantarle pelea a los pájaros rojos, pero nunca representaron amenaza alguna para los liderados por Oliver Mármol que, además, trajeron de vuelta a Albert Pujols con la idea de brindarle una despedida honorable y emotiva. Al final, la calidad de la leyenda dominicana fue más grande que las intenciones del equipo de tenerlo en sus filas “simbólicamente”: no sólo jugó más de lo esperado, sino que contribuyó genuinamente para el logro de los objetivos grupales de clasificar a la postemporada, mientras sobrepasaba la barrera histórica de los 700 cuadrangulares. Pareciera merecer Pujols un retiro con titulo campeonil incluido, solo que el camino para Cardenales será un poco más prolongado al tener que ir a la serie de comodines ante Phillies de Philadelphia y si salen airosos, fajarse con los Bravos de Atlanta… todo eso para tener la posibilidad de disputar el título de campeonato de la Liga Nacional.

Hablar del oeste de la Liga Nacional, pareciera limitarse a referir una temporada avasallante y sin enemigos para Dodgers de Los Ángeles. Ganaron 111 juegos (cerca de la marca de 116 de Seattle en 2001) y perdieron apenas 51 cotejos. Terminaron con 22 juegos sobre su más cercano seguidor en la división y, entre otras menudencias, acumularon un diferencial de carreras a favor de “más 334” … Todo pareció funcionarles y con esos antecedentes llegan a la postemporada para desafiar en primera vuelta al ganador entre San Diego y Mets. Tendrán la necesidad de manejar tantos días de descanso y replantearse el hecho de que en postemporada el margen de error es pequeño y el antecedente de dominio en la división ya solo es parte de la historia.

Ratificaron favoritismo: Dodgers, Cardenales

Sorprendieron gratamente: Phillies (por su acceso a la postemporada)

Decepcionaron: San Diego (aunque clasificó, se esperaba mejor actuación), San Francisco

Equipo a seguir: Milwaukee

El pronóstico, siempre difícil…

Ya nuestra columna anterior hablaba precisamente de perder apuestas. No ha sido nuestro fuerte el de pronosticar, especialmente en series de postemporada.

No obstante, haciéndonos eco de la historia de la temporada regular, sería casi un despropósito no contar con Dodgers y Yankees como candidatos al Clásico de octubre. Sería, además, la más comercial y mediática de todas las combinaciones posibles para una Serie Mundial.

Dicho esto, solo resta disfrutar de una prometedora postemporada, con formato nuevo que incluye mas invitados. A ver si encaja en las expectativas económicas de MLB o termina siendo objeto de modificaciones a futuro por ser muy larga o injusta con los campeones de división, como muchos ya han manifestado.

Falta mucho aun… ¡ pero falta menos…!