Salud

El mundo multiplica los controles a los viajeros procedentes de China

Casi tres años después de la detección de los primeros casos de coronavirus en Wuhan (centro), China desmanteló a principios de diciembre su draconiana política sanitaria de "covid cero"

Publicidad
OMS origen de la pandemia
Archivo

Después de Estados Unidos, Japón, Canadá y otros países europeos, Australia anunció el domingo que exigirá test negativos de covid-19 a los pasajeros procedentes de China por el repunte de contagios en el gigante asiático.

«Esta medida es una respuesta a la ola significativa de infecciones de covid-19 en China y a la posibilidad de aparición de variantes de virus en este país», explicó el ministro australiano de Sanidad, Mark Butler.

La exigencia de una prueba PCR negativa empezará a aplicarse a partir del 5 de enero a cualquier pasajero llegado de China.

El gobierno de Canadá había anunciado antes una medida idéntica en «respuesta al aumento de covid-19 en la República Popular de China y debido a los pocos datos epidemiológicos y de secuenciación del genoma disponibles sobre estos casos».

Marruecos fue más lejos y directamente prohibió la entrada en su territorio a todos los pasajeros procedentes de China a partir del 3 de enero.

Aunque varios países europeos como Francia, Italia y España ya han restringido la llegada de viajeros de China, todos los Estados miembros de la Unión Europea deben reunirse el miércoles para discutir una respuesta común, anunció Suecia, que asume a partir de este domingo la presidencia semestral del bloque.

«A falta de información completa de China, es comprensible que los países tomen las medidas que creen que protegerán a sus poblaciones», afirmó el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.

Casi tres años después de la detección de los primeros casos de coronavirus en Wuhan (centro), China desmanteló a principios de diciembre su draconiana política sanitaria de «covid cero».

Desde entonces, los hospitales se llenaron de pacientes, en su mayoría ancianos, los crematorios se encuentran saturados y numerosas farmacias carecen de medicamentos contra la fiebre.

El país informó el domingo de 5.100 nuevos contagios y un muerto por covid-19. Sin embargo, los expertos consideran que estas cifras no encajan con la realidad ante el fin de las pruebas covid sistemáticas y la redefinición de las muertes por covid.

A pesar del repunte epidémico, las autoridades terminarán el 8 de enero con las cuarentenas obligatorias para los llegados del extranjero, lo que permitirá a los chinos emprender viajes internacionales tras casi tres años encerrados en el país.

«Luz de la esperanza»

«La prevención y el control de la epidemia han entrado en una nueva fase. Todavía estamos en un momento difícil», pero «la luz de la esperanza está ante nosotros», afirmó el presidente Xi Jinping en un discurso televisado de Año Nuevo.

Importantes multitudes se congregaron para festejar el fin de año en Shanghái y Wuhan, aunque los internautas hablaban de celebraciones más tranquilas que los años anteriores.

La OMS anunció el viernes que se había reunido con responsables chinos para abordar el repunte de la epidemia y que les había pedido compartir «de forma regular y en tiempo real datos específicos sobre la situación epidemiológica».

Un reciente estudio de investigadores chinos publicado en la revista «Frontiers of Medicine» reveló que existía unas 30 subvariantes de ómicron circulando en Shanghái desde hace meses.

En su discurso de Año Nuevo, la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, dejó de lado las tensiones con Pekín y dijo que estaban «dispuestos a aportar la asistencia necesaria en base a preocupaciones humanitarias».

Publicidad
Publicidad