El director del aeropuerto de Fort Lauderdale, Kent George, dijo este viernes en conferencia de prensa que las llamas que procedían de la turbina izquierda del avión no entraron en la cabina del aparato y que entre 170 a 230 litros de combustible fueron derramados en la pista.
La aerolínea estadounidense Dynamic Airways aseguró este viernes que el avión que se incendió este jueves en el aeropuerto de Fort Lauderdale (Florida, EEUU) instantes antes de despegar rumbo a Caracas superó las inspecciones de seguridad.
«Después de pasar exitosamente las inspecciones requeridas de seguridad, mecánicas y operativas antes del vuelo, el vuelo 2D0405 de Dynamic International Airways estaba rodando por la pista y preparándose para una salida puntual», dijo hoy en un comunicado la compañía.
En este sentido, la portavoz de la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos Kathleen Bergan dijo hoy que el aparato, un modelo Boeing 767, no había registrado ningún tipo de incidentes o problemas.
La aerolínea con sede en Greensboro, Carolina del Norte (EEUU), destacó además que «las acciones de la tripulación de la cabina fueron ejemplares y de conformidad con su entrenamiento de seguridad».
El motor izquierdo del vuelo 2D0405, con 90 pasajeros y una tripulación de 11 personas a bordo, se incendió cuando se dirigía a la pista de despegue, por lo que debieron ser evacuados sus ocupantes, 21 de los cuales fueron ingresados, y dos ellos aún se mantienen hospitalizados en estado estable.
Por ello, el director de Operaciones de Dynamic Airways, Don Dodson, expresó sus «más sinceras disculpas» a los pasajeros y allegados por este «incidente».
«Los tripulantes del vuelo, así como el personal del aeropuerto, advirtieron un problema en un motor durante el rodaje por la pista y actuaron según los procedimientos de emergencia», señaló la compañía, que destacó que la experiencia del capitán y del primer oficial es de 15.700 y 4.140 horas de vuelo, respectivamente.
El director del aeropuerto de Fort Lauderdale, Kent George, dijo este viernes en conferencia de prensa que las llamas que procedían de la turbina izquierda del avión no entraron en la cabina del aparato y que entre 170 a 230 litros de combustible fueron derramados en la pista.
La FAA indicó este jueves que un avión que se trasladaba detrás del Boeing 767 «observó una fuga de combustible poco antes de que comenzase el fuego» justo cuando transitaba por la pista y se «preparaba para despegar».
Dynamic Airways, que hoy ya retomó su actividad regular, aseguró que enviará a un equipo para ayudar al Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, en inglés), que ya mandó a expertos al aeropuerto de Fort Lauderdale para investigar el suceso.
«No nos gustaría conjeturar sobre las posibles causas del incidente durante la investigación en curso, y todos nosotros en Dynamic tenemos el compromiso de cooperar plenamente con la NTSB y otras autoridades», agregó la aerolínea.
La portavoz de la FAA indicó que el Boeing 767 fue entregado en 1986 y pertenece a una compañía de alquiler de aviones con sede en el estado de Utah.
Al menos hasta el 12 de septiembre se mantiene el cierre de los vuelos comerciales de pasajeros en Venezuela, informó el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC), mientras la pandemia de coronavirus apenas acelera su fase exponencial en el país.
Israel y Estados Unidos han acusado durante mucho tiempo a Mahan Air de transportar armas para guerrilleros vinculados con Irán en Siria y en otros lugares. Estados Unidos impuso sanciones a Mahan Air en 2011, diciendo que brindó apoyo financiero a la élite de la Guardia Revolucionaria de Irán. Además, las tensiones han aumentado entre Teherán y Washington desde 2018, cuando el presidente Donald Trump se retiró del acuerdo nuclear de Irán de 2015 y volvió a imponer sanciones que han golpeado la economía de Irán.
Tras vivir momentos de pánico, un centenar de pasajeros sobrevivieron este martes a la violenta caída del avión en que viajaban, poco después de un despegue fallido desde el aeropuerto internacional de Durango, en el norte de México, en medio de una tormenta.
