Algunos diputados que celebran la intentona de golpe de Estado y otros que no. Unos estaban en pijama y otros ya estaban prevenidos, esperando órdenes de superiores. En lo que sí coinciden todos es que estaban pegados a sus televisores y que cuando apareció Hugo Chávez en sus pantallas, la historia se volcó.
El 4 de febrero de 1992, el rostro del que parlamentarios de la tolda roja llaman el «Comandante Eterno» apareció, joven y atosigado por una luz intensa de flash, en las televisiones de los venezolanos luego de una rebelión militar que dejó una cifra oficial de 32 muertos.
Rumores corrieron a partir de las 3 de la mañana. Fue al día siguiente, cuando todos se despertaron que la información fue esclarecida por los medios de comunicación y las fuentes oficiales que se pronunciaron ante los sucesos de violencia. Los siguientes legisladores cuentan qué estaban haciendo cuando se enteraron de que un grupo de militares intentó llevar a cabo un golpe de Estado contra el expresidente Carlos Andrés Pérez.
Ricardo Sanguino (72 años)
El diputado por el estado Táchira ante la Asamblea Nacional vivía en la urbanización El Paraíso y la rebelión lo agarró desprevenido. Unos Guardias Nacionales se montaron en el techo del edificio donde vivía. Desde el penthouse los funcionarios observaron con los binoculares de juguete de su hijo cómo los tanques entraban por el túnel que separa El Cementerio de El Paraíso.
«Yo estaba en mi casa con mi familia. Seguía lo que transmitían los medios de comunicación hasta el momento en el que salio el presidente Chávez, quien era el líder de la rebelión, diciendo que no se habían cumplido los objetivos. Por ahora», enfatizó.
Alfonso Marquina (50 años)
Toda la movilización militar de esa madrugada ocurrió en las narices del legislador de Primero Justicia: «Mi mamá vive en el Paseo de Los Ilustres, muy cerca de donde pasaron muchos de esos tanques», señaló. Cuando advirtió lo que ocurría se preguntó qué podía hacer, pero concluyó que no mucho.
«Lo que recuerdo son los titulares, la cantidad de muertes y las imágenes que eran realmente dantescas y trágicas», indicó.
Elías Matta (55 años)
Era militante del partido la Causa R y fueron sus compañeros quienes le informaron de que «algo raro estaba pasando», relató el diputado de Un Nuevo Tiempo. En su casa, cuenta, todos estaban impactados y no despegaban los ojos de la televisión. «A eso de las tres de la mañana me dijeron que había un movimiento de tanques por la Circunvalación 2 en Maracaibo [estado Zulia]». En esa entidad y en todas las otras, la rebelión fue exitosa. En todas menos en la capital.
«Cuando salió Chávez en la pantalla, la gente se impactó mucho más y vio la posibilidad de que hubiera un cambio», dijo.
Víctor Clark (33 años)
En la casa de Falcón del parlamentario del PSUV, todos se despertaron en la madrugada y prendieron la televisión. Buscaban en los canales una explicación para el alboroto, que él no considera un golpe de Estado, sino una rebelión cívico-militar. Clark recuerda «como si fuera ayer» la cara de Hugo Chávez al asumir la responsabilidad de los hechos. Él tenía 9 años.
Nora Delgado (56 años)
Estaba fuera de Caracas porque trabajaba en Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa), aclaró la diputada del PSUV. Se enteró de la insurrección militar en la refinería El Palito, estado Carabobo: «Me enteré por la televisión del «por ahora».
Óscar Figuera (62 años)
El legislador del Partido Comunista de Venezuela (PCV) era presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de Venezuela en ese momento. Se encontraba en una asamblea de trabajadores cuando se enteró: «No teníamos noción de lo que estaba pasando. Nos sorprendió. Era militante del PCV y no teníamos claro cuál era el carácter de la rebelión».
Freddy Guevara (30 años)
«Probablemente estaba jugando con las Tortugas Ninja», aseguró. El parlamentario del partido de la oposición Voluntad Popular tenía apenas 6 años cuando ocurrió la intentona.
Luis Lipa (61 años)
Al diputado de Acción Democrática le «dio mucha tristeza» enterarse del intento de golpe, le pareció innecesario. Para el momento, Lipa era concejal de Apure y se acercó a la gobernación en la madrugada para defender al gobernador del estado si llegaba a eso.
La intentona de golpe de Estado no logró sus objetivos; los rebeldes se rindieron. Los oficiales sublevados que comentaron esa maniobra fueron los tenientes coroneles del Ejército: Hugo Chávez, Francisco Arias Cárdenas, Yoel Acosta Chirinos y Jesús Urdaneta.
En este 2024 se cumplen 32 años de de los hechos del 4 de febrero bajo la presidencia de Carlos Andrés Pérez. Valga la ocasión para reconocer en él no sólo al decidido y valiente líder que enfrentó aquella vil insurrección con gallardía y éxito, sino también para poner de relieve su talante de gran demócrata, civilista, visionario, institucionalista y Jefe de Estado
¡La salsa del pavo tiene que ser buena para la pava! ¿Quieren sacar a Guaidó? ¡Tienen que salir todos! ¡Vergüenza deberían sentir por sus acciones! ¡Pobre Venezuela, pobre Venezuela, pobre Venezuela, carajo!
Al menos 316 casos de desfalco al patrimonio nacional son investigados internacionalmente y los militares están presentes en 103 empresas públicas y 11 ministerios, recoge investigación de Transparencia Venezuela en el seguimiento a dos décadas de gobiernos chavistas. En los ocho años de gestión que lleva Nicolás Maduro ambos factores, militarismo y corrupción, se han profundizado.
