¡La cola vive, el hambre sigue! La "guerra económica" cumple su tercer año este 2016 y los únicos caídos son los venezolanos que deben madrugar para conseguir un kilo de harina de maíz, aceite o azúcar y estar sometidos a las dictados de la mafia "bachaquera". Los generales de escritorio de esta épica, en cambio, como Carlos Osorio o Rodolfo Marco Torres siguen dirigiendo o son protegidos ante la batalla que ya perdieron.
El Abastos Bicentenario de Terraza del Ávila de Caracas amaneció este lunes con la misma imagen que presenta desde hace meses: kilométricas colas de personas y bachaqueros que buscan un alimento regulado. El sábado, la policía debió disolver esa misma cola ante las protestas por la falta de comida.
Esa escena se repitió este lunes en Los Teques en una manifestación por alimentos. Las protestas se multiplican con el avance de la escasez. Al igual que la impaciencia.
En un nuevo aniversario de su muerte Alí Primera es visitado por quienes detentan el poder. Pero hoy Venezuela sufre injusticias sociales que hacen palidecer a las denunciadas en las canciones del Cantor del Pueblo.
El desabastecimiento de medicamentos esenciales en el país se ubica en promedio por encima de 35%, de acuerdo al más reciente informe de la organización Convite. En Caracas registró 64,7%
En febrero, la OMS estimó que más de medio millón de personas en estos países necesitaban 1,2 millones de botellas de oxígeno al día. El oxígeno medicinal es producido principalmente por muchos actores locales y regionales, porque uno de sus principales problemas es que es difícil de transportar en largas distancias.
