Narváez comparó la situación actual con la que se evidenció en 1999 o en los tiempos del expresidente Alberto Fujimori en Perú, en donde las instituciones públicas sólo ejecutan las decisiones emanadas del Ejecutivo.
Para el jurista, es un «grave error» que el Gobierno quiera anular las funciones de la Asamblea Nacional y así, eliminar el «contrapeso necesario en cualquier administración» con el único fin de perpetrarse en el poder sin importarle la situación de los venezolanos.
“Nuevamente la Asamblea Nacional sufre un atentado, esta vez por parte del Contralor General de la República, Manuel Galindo quien al parecer ha sido designado para convertirse en un segundo Fujimori en Venezuela para cerrar la Asamblea Nacional”, subrayó.
Hizo un llamado de reflexión y alerta a los diversos entes del Estado así como a la Fuerza Armada Nacional a recapacitar por el bien del país. “¿Hasta dónde piensan llevar a la población? ¿Es que quieren acabar con la Asamblea Nacional? Decídanse, métanle los tanques y digan que no existe la democracia porque son un sistema totalitario”.
Con respecto a la designación de Maikel Moreno como presidente del TSJ, el abogado Rafael Narváez consideró que su nombramiento es una «profanación a la ética y la conducta”, ya que según su opinión, ese puesto no lo puede ocupar todo el mundo. Finalizó diciendo que Moreno está «politizado» y de esa forma, pierde su capacidad de poder llevar las riendas del Poder Judicial.