Médicos rurales de Táchira suspenden pasantías por la inseguridad

Acompañado de docentes, médicos y estudiantes de medicina, Renny Cárdenas narró como tres pasantes rurales que se despeñaban en la población de Umuquena, municipio San Judas Tadeo, en la zona norte del Táchira, fueron victimas de hampones que no solo se llevaron sus pertenencias, sino que los golpearon y amenazaron de muerte.

“Dos damas y un caballero fueron golpeados y amenazados con un arma de fuego. Las muchachas tienen moretones, al muchacho le lesionaron piezas dentales y tienen el trauma psicológico”, explicó.

El asalto ocurrido el 14 de marzo es inédito debido a la carga alevosía con la que se cometió, precisó el coordinador docente de la escuela de medicina.

“Ingresaron a su residencia aprovechando las horas de descanso de los muchachos y les dijeron: `médicos entreguen sus cosas, para acá no vuelvan más nunca, si regresan los matamos. Ustedes no tienen que venir más para acá. Se llevaron todos sus equipos médicos, ropa, libros, teléfonos móviles, equipos electrónicos equipos, todo lo que uno va adquiriendo durante la carrera con un costo que nadie sabe lo caro que se volvió, porque todo en el país está dolarizado. Así mismo se llevaron un automóvil que apareció horas después”.

De acuerdo al docente-médico el mensaje amedrentador corresponde a que posiblemente los atacantes eran personas de la misma comunidad que temen ser reconocidas por los jóvenes médicos.

La denuncia de la acción hamponil que mantiene en alerta al gremio médico del Táchira fue interpuesta por galenos y estudiantes de medicina ante los cuerpos policiales y la Fiscalía del Ministerio Público para que se aboquen a investigar los hechos.

“Exigimos que las autoridades a quien les corresponda hagan su trabajo, agarren a estos sujetos, facinerosos, malandros, y se haga justicia, y se le reintegre a estos muchachos lo que les quitaron. Se hizo la denuncia formal y exhortamos al gobierno regional, alcaldías y a quienes corresponda, a fin de garantizar la protección para quienes trabajan para el Estado y en hacer el bien a la comunidad”, puntualizó Renny Cárdenas.

En vista de la situación de riesgo que presentan los médicos rurales la coordinación docente de la ULA-Táchira, decidió retirarlos de los 29 recintos medico asistenciales que venían ocupando a los largo de la geografía tachirense.

“Hemos recogido a todos los estudiantes. Decidimos responsablemente traerlos por la situación que presentan. Vamos a ver qué medidas se pueden tomar, ya tuve comunicación con el comisionado de Salud a quien le pareció preocupante que 29 médicos internos fueran replegados”, agregó.

Los estudiantes de medicina en el área rural cumplen una función social, y quienes van a las pasantías rurales prestan apoyo y atención al sector salud, brindan un diagnóstico y prevención al tratar de manera oportuna a la población, docente de la carrera de medicina.

Otras victimas del hampa

Héctor Hidalgo, estudiante del quinto año de medicina de la ULA, exigió seguridad a los cuerpos de seguridad del Táchira y narró como fue atacado por un grupo de delincuentes a pocos metros de Hospital Central de San Cristóbal, cuando se dirigía a cumplir la guardia de rotación.
“Fui atacado a tres cuadras del hospital por un individuo que bajo de un carro tipo taxi, sin placa y apuntándome con un arma de fuego me robó el celular. Le rogué prácticamente que no me quitara el bolso y mi almuerzo que era lo que tenia para trabajar.”, expuso el estudiante.

Po su parte, Deivi Delgado, cursante del último año de medicina lamentó la situación que enfrentaron sus compañeros frente a la ola de inseguridad que azota al Táchira y de la que nadie escapa.

El futuro galeno comentó que a finales del mes de diciembre, también fue victima del hampa cuando salía del hospital, rumbo a su casa.

“Me robaron el maletín todos los equipos médicos, tensiómetro, martillo neurológico, carnet de identificación, materiales y útiles de trabajo. No pude hacer nada, el temor por mi vida me hizo entregar todo y me quede sin ningún tipo de material para llevar a cabo la asistencia a quienes la requieran”.

De acuerdo a los estudiantes y médicos la inseguridad que vive el país los desmotiva a continuar ejerciendo su labor y lamentan que la solución sea cruzar la frontera para buscar un mejor futuro fuera de Venezuela.