«Ninguna Asamblea puede catalogarse como Constituyente si primero no bebe de la soberanía popular. Sus bases comiciales deben pasar por la aprobación universal y directa de todo el país. Es impensable elegir constituyentistas si todo el pueblo no aprobó antes cuáles serán los términos y condiciones de esa elección. Y luego, esos señores deberán volver a someter a la aprobación popular el producto de su labor», aseveró en su escrito publicado este domingo.
La ex funcionaria pública recordó cómo fue el referéndum constituyente de 1999, impulsada por el padre político de Maduro, Hugo Chávez, y calificó como una regresión en materia de Derechos Humanos las bases comiciales de la Asamblea Nacional Constituyente propuesta por el Primer Mandatario.
«Si tanto la consulta de elaborar una nueva Constitución como su texto íntegro fue sometido a Referendo Popular en el año 1999, fustigando el pasado absurdo en el que una cúpula se encerraba a pensar como creían ellos que nosotros queríamos ser gobernados ¿No es acaso una regresión en materia de Derechos Humanos retornar a esa práctica? ¿Acaso no es esa idea una violación flagrante de los derechos humanos de todo el pueblo a expresarse a través del voto? ¿Y qué consecuencias terribles puede traernos a todos la tozudez de querer imponerla a trocha y mocha?», cuestionó.
De acuerdo con las declaraciones ofrecidas el pasado jueves por la rectora principal del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, más de 5 millones de personas del registro electoral no estarán incluidas en la Constituyente, por lo tanto este tipo de elección deja de ser universal.
Ramírez repudió además las 61 víctimas mortales de ocho semanas de protestas contra el gobierno de Maduro y subrayó que el Estado venezolano tiene la «enorme responsabilidad» de impedir más muertes.
«Desde hace dos meses hay vidas que se escurren como agua derramada por un desagüe que ninguno parece capaz de contener. Y si entendemos que se violan Derechos Humanos por actuación u omisión, impedir esas muertes es una enorme responsabilidad del Estado y la sociedad porque si no somos capaces de sentir compasión por la muerte de un compatriota –y ya son más de cincuenta- no merecemos ser definidos como humanos», destacó.
Criticó la actuación que ha tenido el actual Defensor del Pueblo, Tarek William Saab, ante las represiones de jóvenes venezolanos a manos de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana y la Policía Nacional Bolivariana, así como la muerte de 61 ciudadanos en las marchas efectuadas en los dos últimos meses contra el gobierno de Maduro.
«Hoy miro con tristeza aquella institución que fue vigorosa y orgánica, la Defensoría del Pueblo, a la que la mayoría de sus servidores prefirieron abandonar y quedarse sin empleo antes que ser usados como el público de un titular que parece estar más interesado en defenderse a sí mismo que al pueblo, explayando su historia personal en cada intervención», puntualizó Ramírez quien estuvo al frente de la Defensoría durante siete años, entre 2007 y 2014.
El Estímulo contactó al Defensor del Pueblo para conocer su posición ante las críticas de la ex funcionaria pero no obtuvo comentarios de su parte.
«Y no me cansaré de repetir que las lealtades son con nuestra madre, Venezuela, con todo su pueblo, a quien teníamos la obligación de mantener enamorado y con sus símbolos patrios. Tenía que decirlo. Es todo», concluyó.
LA VOZ DEL PUEBLO ES LA VOZ DE DIOS
Mi mamá siempre me decía que el único marido de una mujer es su trabajo porque es…
Posted by Gabriela Del Mar Ramírez on Sunday, May 28, 2017
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