Agentes de la GN «agredieron, retuvieron e impidieron ayer (martes) el acceso al Congreso a varios periodistas y legisladores», entre ellos el camarógrafo de Venevisión José Rivas y los parlamentarios Jony Rahal y Winston Flores, señaló en un comunicado la SIP, con sede en Miami.
Rivas denunció que fue pateado por los militares y su cámara destruida, mientras que los diputados sufrieron golpes y empujones en una refriega con las fuerzas del orden por la negativa de estas de permitir el acceso de la prensa al Parlamento, controlado por la oposición.
El presidente de la SIP, el peruano Gustavo Mohme, expresó su repulsa por estos «actos violentos» y afirmó que forman parte de una «política de Estado para debilitar aún más a los periodistas venezolanos que ejercen su trabajo en condiciones de riesgo extremo».
Según el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa de Venezuela (SNTP), esta es la sexta ocasión en lo que va de mayo que la GN niega la cobertura de los medios dentro de la sede del Legislativo.
Estos hechos violentos se producen pocos días antes de las elecciones presidenciales del próximo domingo, unos comicios «cuestionados por Gobiernos y organismos mundiales por la falta de transparencia, de observadores internacionales y por sospechas de fraude», agregó.
Por su parte, el mexicano Roberto Rock, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, aseguró que «es evidente la intención oficial de acabar con los periodistas y medios independientes en Venezuela utilizando todos los recursos a su disposición, entre ellos la Guardia Nacional Bolivariana».
Rahal y Flores forman parte de los 112 diputados con los que la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) se aseguró el control del Parlamento en las últimas elecciones legislativas de Venezuela, que le dio a la oposición la mayoría por primera vez en 19 años.
Mohme y Rock reiteraron la petición de la organización en abril pasado a los gobernantes participantes en la Cumbre de las Américas, a los que llamó a «impulsar medidas más drásticas que no permitan que el régimen (venezolano) intente perpetuarse en el poder de espaldas de sus ciudadanos».
En la pasada reunión de la SIP en Medellín (Colombia), Rahal junto con María Corina Machado, líder de la coalición Unidad Democrática, Luisa Ortega, fiscal en el exilio y el expresidente de Bolivia, Jorge Quiroga Ramírez, alertaron de la escalada de la violencia en estos meses de convulsión electoral.
Unos comicios en los que la «mayoría de los líderes se ha abstenido de participar para no legitimar un proceso irregular, fraudulento».]]>