Entre violencia, desidia, suciedad y paralización Caracas cumple 452 años
Con el triste honor de ser una de las ciudades más violentas del mundo, Caracas, la capital de Venezuela celebra hoy sus 452 años.
Con el triste honor de ser una de las ciudades más violentas del mundo, Caracas, la capital de Venezuela celebra hoy sus 452 años.
En medio del colapso de sus servicios públicos y la desidia de sus gobernantes, todos representantes del partido de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, la dirigencia solo se ha dedicado a tratar de maquillar los problemas para mantener sus cuotas de poder.
En el reciente trabajo realizado por la organización española “El Orden Mundial”, que lleva a cabo los estudios en torno a las ciudades más violentas del planeta, Caracas sigue en el primer lugar, con un promedio de 130,35 homicidios por cada 100.000 habitantes. Otras ciudades venezolanas como Maturín, Ciudad Guayana y Valencia, son las que siguen en el ranking internacional como los territorios más sangrientos del planeta.
“La violencia se ha apoderado del país. Hay una epidemia de violencia en Venezuela, que antes estaba concentrada en ciertos puntos del territorio”, había advertido en diciembre pasado Roberto Briceño León, director del Observatorio Venezolano de Violencia, durante la presentación del informe anual de violencia de esta ONG. En aquél momento reportaron 81,4 muertes violentas por cada 100.000 habitantes. Hubo en total 23.047 muertes violentas en 2018.
Briceño León advierte que las cifras mostraron una reducción con respecto al informe de 2017, cuando la tasa de muertes violentas por cada 100.000 habitantes fue de 89.
La cifra total de decesos violentos ese año fue de 26.616, hecho que puede tener varias causas entre ellas un sub-registro de muertes, que calificó como una cifra negra de homicidios por la censura que se le ha colocado a los medios para dar a conocer las cifras de la violencia. Hay prohibición del ingreso de datos a las fuentes oficiales. Además se impide la presentación de las denuncias para que no quede registro, así como también se limita a los medios los datos sobre la emigración de los delincuentes a otros países.
Una ciudad insegura
El 13 de julio del 2018, Ronelis Villanueva, de 20 años de edad, fue asesinada de tres disparos, por un par de delincuentes para robarle el teléfono celular, en el sector La Bandera, de Los Rosales, en Caracas. La joven madre que dejo huérfanos a dos niños, es parte de la lista de los 1.364 asesinatos cometidos en la ciudad capital en 2018 y que han sido registrados por el Monitor de Victimas.
De acuerdo al informe de 2018 de esta organización, de los 1364 homicidios, 256 personas murieron a manos de las FAES en Caracas. Las ejecuciones se convirtieron en el móvil más frecuente de los homicidios el año pasado, 601 personas murieron a manos de los cuerpos de seguridad del Estado, lo que representa 44% de los asesinados. Las FAES estuvo además involucrado en 44 homicidios múltiples, de los cuales 11 fueron masacres de cuatro víctimas.
Anthony Alfredo Urbina, de 20 años de edad, fue asesinado por los funcionarios del Faes, el 8 de abril del 2019, en el sector “Los Niches”, en la zona de El Cementerio, parroquia Santa Rosalía, en Caracas, es uno de los casos señalados como ejecuciones por parte de los funcionarios policiales.
La tasa de personas muertas a manos de los uniformados es de 18,2 ciudadanos por cada 100.000 habitantes en Caracas, es decir, 440 de cada 1.000 homicidios sucedidos en la capital fueron cometidos por funcionarios… Todas las víctimas eran hombres menores de 35 años de edad y clase baja.
“Caracas es una ciudad violenta, en donde los ciudadanos no sabemos a quién debemos tenerle más miedo, si a los delincuentes que cometen sus fechorías o a los policías que supuestamente nos cuidan”, señaló un vecino del sector Los Rosales, quien solicito mantener su identificación bajo resguardo.
En Sectores como El Cementerio, parte alta de El Valle, la Cota 905, los ciudadanos están amenazados por bandas delictivas, que no han podido ser controladas por los cuerpos de seguridad, a pesar de los múltiples programas de seguridad anunciados, entre ellos los Cuadrantes de Paz, todo han sido un fracaso.
Una ciudad sin servicios públicos
Jesús Armas, es coordinador de las ONG Ciudadanía sin Limite y Fundación Ciudad, dedicadas al monitoreo de las calidad de los servicios públicos en Caracas y de la propuesta de políticas públicas para mejorar la calidad de vida de los caraqueños.
“En los últimos estudios que hemos realizado hemos verificado una desmejora en la calidad de los servicios públicos de Caracas, siendo el problema de la distribución de agua potable el área que ha reunido la mayor cantidad de denuncias. Los ciudadanos señalan haber dejado de recibir el servicio por el sistema de tuberías y han tenido que comenzar a cargar agua, para satisfacer sus necesidades básicas. Nuevamente son los sectores populares los más perjudicados por estar, principalmente en los cerros los caraqueños.
“En nuestro estudio también se señala que los caraqueños han optado por adquirir agua envasada en botellones o tratada en procesos de purificación, motivado a la mala calidad del agua que distribuye Hidrocapital”, señaló Armas.
Durante los últimos meses el servicio de electricidad también ha sufrido serias desmejoras. “A pesar de que las autoridades afirman que el problema son los supuestos ataques a las estaciones eléctricas, los ciudadanos saben que todo se trata por la falta de mantenimiento que desde hace mucho tiempo se dejo de realizar al sistema, y, lamentablemente, los apagones y fallas en el voltaje continuarán si no se buscan los correctivos necesarios”, dijo Jesús Armas.
Una ciudad mugrienta
Las calles de Caracas, están sucias, llenas de basura y con malos olores, la razón el pésimo servicio de aseo urbano que se presta desde la alcaldía del municipio Libertador, en donde Erika Faría, en representación del partido de gobierno, es la primera autoridad de la ciudad.
“En la ciudad el servicio de aseo urbano lo presta la empresa Supra Caracas, bajo la supervisión de Erika Farías, que así como sus antecesores Jorge Rodríguez y Freddy Bernal, también chavistas, no lograron darle una solución al problema de la basura en la capital. La alcaldesa y la jefe de gobierno, Carolina Cestari, ambas autoridades proclamadas por un gobierno usurpador, han dejado en el abandono a Caracas y solo se han dedicado a mantener en el poder a Maduro, con puras mentiras y políticas públicas incoherentes que”, dijo Armas.
Indicó que hace 10 años Caracas contaba con unas 100 unidades recolectoras de basura y que actualmente solo 20 o 25 unidades recorren la ciudad. “Estos camiones recolectores son insuficientes para recoger las 1.200 toneladas de desperdicios que se generan en la ciudad diariamente, por lo cual las calles se ven sucias y tienen mal olor”.
“También se presenta un gran déficit en lo que se refiere al mobiliario de aseo urbano, como son los contenedores y papeleras, mientras que los obreros realizan su trabajo sin tener los equipos necesarios como guantes, botas, uniformes, escobas, rastrillos, palas, entre otros”, afirmó Armas.
Además se presentan graves problemas de insalubridad en la planta de transferencia ubicada en el sector Las Mayas, parroquia Coche, lugar que se ha convertido en un foco de infección para todos los vecinos que viven en su alrededor.
Una ciudad sin transporte
El presidente de la central Única de Carros Libres y por Puestos, José Luis Montoya, señala que en Caracas 95% de autobuses que prestan el servicio de transporte público se encuentran paralizadas por falta de repuestos, entre ellos cauchos, así como baterías y que el otro 5% restante trabaja con serias fallas y para funcionar deben ser reparadas a diario, después de la jornada diaria por los dueños de las unidades.
“Las autoridades no han ofrecido ningún tipo de solución al grave problema que afecta el servicio de transporte, ni a los caraqueños ni en el resto del país. Todos los programas que han presentado han sido un fracaso, empezando con las llamadas proveedurías, en donde se había prometido la venta a precios solidarios de cauchos, aceites, baterías y repuestos al sector transporte, hecho que ha traído como consecuencia que 95% de los carros se encuentren parados”, dijo Montoya.
Señaló que los más perjudicados son las personas que habitan en los lugares alejados de sus centros de trabajo, pues tienen que gastar todo su saldo en el pago de pasaje.
“Entre las medidas que se han tomado están las de dividir las rutas largas, como por ejemplo la Propatria, Chacaíto Cafetal, en varios tramos para poder cuidar la vida útil de las unidades, además que el costo del pasaje no cubre ese recorrido”, dijo Montoya.
En torno al servicio del metro de Caracas, tanto José Luis Montoya, así como Jesús Armas, consideran que el subterráneo tiene graves fallas por la falta de mantenimiento de las autoridades.
“Después de ser considerados uno de los mejores sistemas de transporte subterráneo del mundo, el metro de Caracas no solo ha perdido su calidad, sino que también se ha convertido en un peligro para los usuarios, por la constantes fallas de los sistemas de seguridad. Entre ellas el alumbrado en los andenes, la falta de aire en los vagones, la carencia de los servicios de vigilancia y de personal en caso de cualquier emergencia, eso sumado al costo del pasaje tan bajo o simplemente el cual no se cobra, no se podrá mejorar el servicio”, señaló Armas.
Por su parte, José Luis Montoya, se refiere a las continuas fallas que presenta este medio de transporte. “Diariamente los usuarios reportan problemas en el sistema del metro, suspenden los servicios y las camionetas y autobuses que tenemos no son suficientes para cubrir toda la demanda, por lo cual a los caraqueños no les ha tocado otra que caminar hasta sus hogares o lugares de trabajo”.
Las autoridades en un intento de dar soluciones han habilitado camiones de carga o llamadas por la ciudadanía “perreras”, para atender a los usuarios. Estos transportes al no ser diseñados para seres humanos violan todas las medidas de seguridad que exigen las ordenanzas y las leyes del país. Algunos son vehículos de plataformas con unas barandas donde mueven a la gente.
“Se han importado unidades de autobuses que traen desde China, que no cuentan con repuestos en el país, que han dejado de funcionar y solo han venido a crear cementerio de unidades que se pueden apreciar en el estacionamiento del metro de La Paz y en el terminal de Oriente, entre otros sectores”, dijo Montoya.
Una ciudad con salud en Terapia Intensiva
Pabro Zambrano, Secretario Ejecutivo de la federación de Trabajadores de la Salud, Fetrasalud, señala que el servicio que se prestan en los hospitales tanto de Caracas como otras ciudades del país, se encuentra en terapia intensiva.
“En Caracas existen unos 17 hospitales, más una gran cantidad de ambulatorios y les podemos asegurar que en todos existen problemas para atender a los pacientes. La infraestructura de los hospitales se ha deteriorado por la falta de mantenimiento del gobierno de Nicolás Maduro, que no ha tomado en cuenta las quejas de los pacientes, familiares y personal de los centros de salud. Tampoco los llamados de atención que han ofrecido las autoridades internacionales”, dijo.
Zambrano asegura los usuarios denuncian que para ser atendidos en cualquier centros de salud de Caracas deben comprar todos los insumos que requieren para ser intervenidos, al igual que los medicamentos, pues no hay nada en las farmacias. De igual forma deben pagar por los exámenes requeridos en los centros públicos pues en los laboratorios no existen los reactivos necesarios.
“En su visita la Alta Comisionada de los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, recibió denuncias por parte de los familiares y personal médico de la crisis hospitalaria que se vive en Venezuela, siendo los casos del Hospital J.M de los Ríos, la Maternidad Concepción Palacios, el Hospital de Coche y el Clínico Universitario, los ejemplos de las pésimas condiciones del servicio de salud en Venezuela”, afirmó.
Son muchas las denuncias que se ha han dado a conocer sobre la muerte de pacientes por la falta de insumos, medicamentos, equipos y personal especializado en los hospitales caraqueños, sin que Maduro ofrezca respuesta mientras sigue afirmando que los problemas de Venezuela son producto del bloqueo internacional.
Estas son algunas de las razones por las cuales los habitantes de Caracas, tienen poco que celebrar en este nuevo aniversario de la ciudad, considerada en otros tiempos como la “Sucursal del Cielo”.