Una pelea por harina y arroz obliga a cerrar uno de los supermercados más grandes del país

«¿Comida? ¡Comida no hay!», gritó uno de los uniformados, su nombre tapado, desde las escaleras de la entrada del Excelsior Gama de Santa Eduvigis. «Lo que hay es esto», gritaba mientras arropaba su mano derecha contra su muñeca izquierda, señalando un arresto. A su lado otro oficial, de apellido Rondón, explicaba que era necesario bajar la santamaría del supermercado «porque ya hay mucha gente adentro y se agotaron los productos de hoy». La llegada de arroz y harina de maíz al establecimiento se encontró con colas desde las 3 de la mañana, pero todo se despachó en apenas dos horas.

Al enterarse la multitud de la desaparición de los productos, intentó entrar a la fuerza en las instalaciones del supermercado. La turba provocó la intervención de oficiales de la GNB, la Policía Nacional Bolivariana y el Servicio Bolivariano de Inteligencia, quienes trancaron todos los accesos y procedieron a ordenar las colas, tanto dentro como afuera, aturdidos por los gritos de «¡queremos comida!» de los que no pudieron adquirir nada.

«Hubo una gente malportada que intentó interrumpir el proceso de compra de la gente, tratando de entrar con violencia, por eso nos vimos obligados a intervenir», relató a El Estímulo uno de los oficiales apostados en la entrada sur. Paralelamente, por la puerta oeste, una GNB pedía orden en la cola mientras informaba «ya les vamos a averiguar si queda comida o no queda comida». La reacción fue un «¡tenemos hambre, queremos comida!» casi al unísono.

Este fue el primer despacho que se realizó con la harina de maíz precocida a su nuevo precio, 190 bolívares por kilo. El arroz permanece a niveles de marzo, a 120 bolívares por kilo.