«El Ministerio de Relaciones Exteriores hace de conocimiento de la opinión pública que el Embajador de la República Oriental del Uruguay le comunicó esta mañana que el ex presidente del Perú Alan García Pérez ingresó en horas de la noche de ayer (sábado) a su residencia», indicó la cancillería en un comunicado.
La nota señala que García «ha solicitado asilo a ese país, conforme a lo dispuesto por la Convención sobre Asilo Diplomático de 1954, de la cual son parte el Perú y Uruguay».
«Dicha solicitud, como indica la Convención arriba citada, deberá ser evaluada por el gobierno de ese país, para lo cual se ha informado a las autoridades de Uruguay que, conforme al artículo IX de la Convención sobre Asilo, el gobierno peruano hará llegar información al respecto», concluye el texto oficial.
El presidente peruano Martín Vizcarra confirmó también la solicitud de asilo del exmandatario, que había denunciado una persecución política en su contra.
«Informo a los ciudadanos del Perú, sobre la solicitud de asilo de Alan García Pérez a la República Oriental del Uruguay», indicó Vizcarra en su cuenta de Twitter.
– Descarta persecución política –
Vizcarra había negado este domingo que hubiera una persecución política contra García.
«Son temas que corresponden a la independencia del Poder Judicial y el Ministerio Público. Nosotros no intervenimos en absoluto, ellos tienen total independencia y ustedes pueden dar fe de ello», dijo Vizcarra a la prensa.
«Cuando fueron intervenidos el expresidente Ollanta Humala y Keiko Fujimori también dijeron lo mismo. Ahora lo dice Alan García», comentó Vizcarra.
García, quien gobernó de 1985 a 1990 y luego de 2006 a 2011, denunció esta semana que el sistema judicial está «descabezado» por una supuesta intervención gubernamental.
El presidente del Poder Judicial, Víctor Prado rechazó el viernes las alegaciones de que existe una campaña de persecución política en el marco del escándalo de corrupción desatado por la empresa Odebrecht.
– Sorpresa para el gobierno –
«El pedido de asilo tomó por sorpresa al gobierno peruano», dijo a la AFP un importante funcionario gubernamental que habló a condición de no ser citado.
Las autoridades uruguayas deben ahora evaluar si el caso del expresidente García se encuadra dentro de lo que prevé la Convención Interamericana de 1954 sobre el derecho de asilo.
«Si Uruguay considera que existen más elementos políticos que jurídicos, le concederá el asilo», estimó la fuente consultada en Lima, quien añadió que Montevideo «puede solucionar el caso en 30 minutos o en cinco años porque la convención de asilo no especifica plazo».
Esta es la segunda vez que García solicita asilo. En 1992 pidió asilo político en la embajada de Colombia.
La justicia prohibió el sábado a García salir de Perú durante 18 meses, después de que la fiscalía ampliara una investigación por supuestos sobornos pagados por Odebrecht para adjudicarse un contrato para la construcción de la primera línea del metro de Lima durante su segundo mandato (2006-2011).
Perú es uno de los países más afectados por la saga de corrupción de Odebrecht, que admitió que pagó 29 millones de dólares en sobornos a lo largo de tres gobiernos peruanos, incluido el segundo de García.
Por el caso Odebrecht también están bajo la lupa de la fiscalía los exmandatarios Alejandro Toledo (2001-2006), quien huyó a Estados Unidos y ahora enfrenta un pedido de extradición; Ollanta Humala (2011-2016), quien estuvo preso nueve meses con su esposa Nadine; y Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018), quien renunció en marzo agobiado por denuncias de corrupción.]]>