Internacionales

Guerrilla ELN asume atentado en Bogotá y Cuba se desmarca

El Gobierno cubano aseguró hoy que "jamás ha permitido ni permitirá que su territorio sea usado para la organización de actos terroristas", horas después de que la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) reivindicara el atentado que el jueves causó 20 muertos en Bogotá.

Publicidad

«Cuba jamás ha permitido ni permitirá que su territorio sea usado para la organización de actos terroristas contra ningún Estado» y «ha cumplido estrictamente su papel como garante y sede alternativa de la Mesa de Diálogos de Colombia entre el Gobierno y el ELN», afirmó a través de Twitter el canciller cubano, Bruno Rodríguez.
A consecuencia del atentado el presidente colombiano, Iván Duque, levantó la suspensión de las órdenes de captura del equipo negociador del ELN que supuestamente está en La Habana y pidió a Cuba su extradición inmediata, a lo que la Cancillería de la isla replicó que respetará los protocolos de los diálogos de paz.
Poco después el Gobierno colombiano respondió a Cuba que «no hay protocolo que ampare el terrorismo» y por eso reiteró su petición a la isla de que le entregue a los miembros del ELN que hacen parte de la delegación de paz, tras la admisión por esa guerrilla de la autoría del atentado contra la Escuela de Cadetes.

«El Gobierno nacional insistirá en la entrega inmediata de los miembros de la delegación del ELN que se encuentran en Cuba y hay una razón profunda para ello, el ELN como organización reconoce su autoría (del ataque terrorista) y como organización debe ser responsable», manifestó el alto comisionado de Paz, Miguel Ceballos, en una rueda de prensa. 
La delegación del ELN, encabezada por Israel Ramírez Pineda, alias «Pablo Beltrán», la integran diez personas.
Rodríguez escribió, en otro tuit, que su país «está contra el terrorismo y contra la guerra, en defensa de la paz».
«Con la moral de haber sido víctima del terrorismo de Estado por décadas y de una ejecutoria intachable, condenamos el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, sean cuales fueren sus motivaciones», agregó el jefe de la diplomacia cubana.
En un artículo con fecha 21 de enero publicado en «Voces», su página de internet, el ELN argumenta que la Escuela de Cadetes, situada en el sur de Bogotá, «es una instalación militar» donde se forman oficiales de Policía «que luego realizan inteligencia de combate, conducen operaciones militares, participan activamente en la guerra contrainsurgente», entre otras funciones.

«Por tanto la operación realizada contra dichas instalaciones y tropas, es lícita dentro del derecho de la guerra, no hubo ninguna víctima no combatiente», afirma el artículo.

El atentado con una camioneta cargada con 80 kilos del explosivo pentolita ya había sido atribuido el pasado viernes al ELN por la Fiscalía General y el Ministerio de Defensa, después de identificar al conductor del vehículo como José Aldemar Rojas Rodríguez, de 56 años, miembro de esa guerrilla.

Dicho ataque detonó también los ya maltrechos diálogos de paz con el Gobierno colombiano ya que el presidente colombiano, Iván Duque, ordenó reactivar las órdenes de captura contra diez miembros del ELN que integraban la delegación de este grupo en Cuba, sede de las negociaciones.

«La paz no avanza y el proceso retrocede si los contendientes en una guerra no se respetan; esto empieza por respetar el dolor de todos», afirma el grupo guerrillero, según el cual, el mandatario «no le dio la dimensión necesaria al gesto de paz» que considera fue la tregua navideña que el ELN hizo entre los pasados el 23 de diciembre y 3 de enero.

Conforme al ELN, las Fuerzas Armadas «aprovecharon este cese para avanzar las posiciones de sus tropas de operaciones».

«Es entonces muy desproporcionado que mientras el Gobierno nos ataca, plantee que nosotros no podamos responder en legítima defensa», dice para tratar de justificar el atentado contra la Escuela de Cadetes de la Policía General Francisco de Paula Santander, que ha sido ampliamente repudiado por los colombianos y por la comunidad internacional.

Ante la gravedad del atentado del jueves, este domingo decenas de miles de colombianos, entre ellos el presidente Iván Duque, salieron a las calles en pueblos y ciudades para rechazar el terrorismo y manifestar su apoyo a la Policía Nacional.

El grupo guerrillero insiste en el artículo «en pactar un cese bilateral para generar un clima favorable a los esfuerzos por la paz», pero no hace referencia alguna a las condiciones planteadas por Duque desde que asumió la Presidencia, el pasado 7 de agosto.
Los negociadores del ELN en los diálogos de paz con el Gobierno colombiano iniciados por el Gobierno de Juan Manuel Santos y suspendidos tras la llegada de Duque al poder han permanecido en La Habana a la espera de la reanudación del proceso de interlocución, si bien no se les ha visto en público en las últimas semanas.
Ante la petición de extradición de los guerrilleros, el Gobierno de la isla ha afirmado que «Cuba actuará en estricto respeto a los Protocolos del Diálogo de Paz firmados entre el Gobierno y el ELN, incluido el Protocolo en Caso de Ruptura de la Negociación» y que se encuentra en consultas con las partes y los países garantes.
Junto a Cuba, los países garantes del proceso son Brasil, Chile, Noruega y Venezuela, y el grupo de países de apoyo y acompañamiento lo integran Alemania, Holanda, Italia, Suecia y Suiza, a los que se suman el Consejo de Seguridad de la ONU y la Conferencia Episcopal de Colombia.
El atentado del pasado jueves contra la Escuela de Cadetes de la Policía colombiana en Bogotá, que dejó 20 muertos, más el atacante, y 68 heridos, fue asumido hoy en un artículo publicado en la página web del ELN.]]>

Publicidad
Publicidad