Aretha Franklin, memorias de la reina del soul

La vocalista nació el 25 de marzo de 1942 en Memphis, Tennessee. Fue la cuarta hija del matrimonio entre el reverendo Clarence LaVaughan Franklin y la cantante de gospel Barbara Franklin, quien poco después abandonó a su familia y falleció cuando ella tenía 10 años. Luego de numerosas mudanzas, la familia Franklin se asentó en Detroit, Michigan, donde la cantante aprendió a tocar el piano de forma autodidacta.

La iglesia en donde predicaba su padre fue el primer escenario de Aretha. Allí convivió con grandes figuras del gospel: Sam Cooke, Mahalia Jackson y Clara Ward. A los 14 años, bajo el sello J.V.B. Records, grabó el disco Songs of Faith, en el que destacan sus interpretaciones de los clásicos del góspel.

Tras un breve contrato con Columbia Record, seis discos y una mudanza a Nueva York, en 1966 Aretha pasó a Atlantic Records. Con la colaboración del productor Jerry Wexler, alcanzó la fama con su álbum I Never Loved a Man (the Way I Love You) y la canción «Respect».

La enérgica versión de la canción original de Otis Redding, grabada en 1967, transformó a este título en un himno feminista y político, y consagró a su intérprete como la nueva reina del soul, con apenas 25 años. La revista Rolling Stone coronó a este éxito internacional como la quinta mejor canción «de todos los tiempos» en una lista de éxitos publicada en 2004 en la que Aretha Franklin aparecía detrás de Bob Dylan, los Rolling Stones, John Lennon y Marvin Gaye.

En la versión de Redding, un hombre clama por el respeto de su esposa, que estima merecen por ser él quien provee para su familia. Pero Franklin, en su versión grabada en el día de San Valentín de 1967 en Nueva York, elimina ese esquema tradicional, colocando las palabras en la boca de una mujer fuerte y dinámica. La cantante conservó los versos pero añadió un coro dinámico, en voces de sus hermanas Erma y Carolyn, y algunas expresiones como ese «sock it to me» algo provocador que puede traducirse como «muéstrame de qué eres capaz». La diva también puso énfasis en ese «R-E-S-P-E-C-T» que más que pedir, exige.

Con este gran éxito se llevó los dos primeros de sus 18 premios Grammy y marcó también el inicio de su carrera internacional. Igualmente, Franklin tuvo decenas de canciones que alcanzaron el codiciado «Top 40», según el Salón de la Fama del Rock and Roll.  Sus hits franquearon estilos, del soul al rythm and blues, del góspel al pop y al jazz.

Entre sus mayores éxitos figuran «Natural Woman» (1968), «I say a little prayer» (1968), «Day Dreaming» (1972), «Jump to It» (1982), «Freeway of Love» (1985) y «A Rose Is Still A Rose» (1998). Un dueto de 1986 con George Michael, «I Knew You Were Waiting (For Me)», alcanzó el número uno en varios países. Asimismo, Franklin influenció a distintas generaciones de cantantes, desde la diva del pop Mariah Carey a la fallecida cantante Whitney Houston, hasta Alicia Keys, Beyonce, Mary J. Blige y la difunta británica Amy Winehouse.

A lo largo de su vida, recibió numerosos premios y reconocimientos. En el año 1997 se convirtió en la primera mujer en ingresar al Salón de la Fama del Rock and Roll. Luego, en 1991, le fue orgado el premio Grammy Leyenda por su influencia en la industria de la música de Estados Unidos. En 2005, recibió la Medalla Presidencial de la Libertad, la más alta condecoración que Estados Unidos otorga a un civil, de manos del expresidente George W. Bush. Tres años más tarde, fue honrada como la Persona del Año de MusiCares y también obtuvo numerosos doctorados honorarios de Harvard y Yale, junto a la inclusión en el Salón de la Fama de Cooperstown y en el Museo y Salón de la Fama de la Música Góspel.

Una de sus presentaciones más memorables fue cuando Franklin cantó «Precious Lord, Take My Hand», en el funeral del ícono de los derechos civiles Martin Luther King. También cantó para la Reina de Inglaterra en el Royal Albert Hall de Londres y en la ceremonia de inauguración de dos presidentes: Bill Clinton y Barack Obama. Incluso llegó a reemplazar a a Luciano Pavarotti en los Grammy de 1998. Su versión del «Nessum Dorma» de Puccini se ha convertido en un clásico con el tiempo.

También cuenta en su haber con la interpretación del himno nacional americano durante la ceremonia de la Super Bowl en su casa, Detroit, en 2006, y una versión de «Rolling in the Deep», de Adele, y de «Ain’t No Mountain High Enough», frente a David Letterman, que le sirvió para convertirse en la primera mujer en alcanzar los 100 éxitos en la listas de R&B/Hip-Hop de Billboard. En el escenario del Kennedy Centers Honors, en Washington D.C, Aretha Franklin interpretó uno de sus grandes éxitos “(You Make Me Feel Like) A Natural Woman” , sacándole lágrimas a Barack Obama y una ovación de pie de parte de la audiencia.

En 2010, la reina del soul suspendió su gira por Estados Unidos. Estaba ya afectada por un cáncer de páncreas, del que fue operada con éxito. Al año siguiente, apareció en el programa de Wendy Williams y reveló que había perdido 85 libras. Allí dijo que había estado enferma y que necesitaba cirugía varios meses antes, pero que no diría para qué.

La cantante nunca reconoció abiertamente su enfermedad, hasta que en una entrevista con Rolling Stone aseguró haber recibido un duro diagnóstico médico: «[Les dije] ‘Ustedes investigan y leen libros, pero no saben mucho de mí. Vengo de una familia que rezaba’. Un par de años después volví al hospital y esos mismos médicos me dijeron: ‘Lo que habíamos visto ya no está’. ¡Aleluya!».

Su último álbum lo grabó en 2017, el número 42 de su carrera: A brand new me. Una reinterpretación de algunos de sus grandes éxitos con el acompañamiento de la Royal Philharmonic Orchestra.

Su última actuación fue en noviembre de 2017, en Nueva York para la Fundación Elton John para la lucha contra el SIDA. Su extrema delgadez llamó la atención de muchos en aquel espectáculo. Meses atrás, en febrero, había anunciado su retiro de las tarimas, pero aclaró que continuaría grabando y actuando en «ocasiones especiales».

El 15 de agosto de 2018, decenas de personas se reunieron en la iglesia bautista de New Bethel, donde la mujer grabó su primer disco a los 14 años, para un servicio dedicado a la cantante de 76 años. Al día siguiente, en la mañana, la leyenda del soul falleció.

Su publicista, Gwendolyn Quinn, indicó que Franklin murió rodeada de amigos y familiares, tras permanecer varios días en cuidados paliativos por el cáncer de páncreas que sufría. «En uno de los momentos mas sombríos de nuestras vidas, no somos capaces de hallar las palabras adecuadas para expresar la pena que destroza nuestros corazones», dijeron sus familiares en un texto transmitido por la publicista de la cantante. «Perdimos a la matriarca y a la roca de nuestra familia. El amor que tenía por sus hijos, sus nietos, sus sobrinos y primos era ilimitado», añadieron.